- Este hábito es, al mismo tiempo, el considerado más perjudicial para los menores. Estos son algunos de los hallazgos del Estudio “Los chilenos y la alimentación saludable” realizado por Aramark y Cadem por cuarto año consecutivo en Chile.
El inicio del año escolar marca para muchos hogares el momento en que se retoman distintos hábitos y rutinas familiares, entre ellos, los de alimentación. Por eso, es también una buena época para hacer cambios o mejoras para fomentar en los niños correctos hábitos al momento de comer.
La última versión del estudio realizado por Cadem y la empresa Aramark, líder en Chile en servicios de alimentación y gestión de instalaciones, reveló interesantes datos sobre cuáles son las conductas más usuales que se tienen con los niños en materia de alimentación.
Más del 60% de los encuestados que tienen hijos o menores de edad bajo su responsabilidad, dijo ser exitoso en la promoción del consumo de agua (66%) e incluir frutas y verduras (63%) en la dieta de los niños.
Al momento de ser consultados sobre cuáles creen que son los hábitos de alimentación saludable más importantes para los menores tres alcanzan la primera preferencia: Establecer horarios regulares de comida, comer en familia y sin distracciones e incluir frutas y verduras en la dieta. Por su parte, los menos valorados son el fomento del desayuno, el consumo de pescado y el de frutos secos, con apenas un 3% de menciones cada uno.
“Efectivamente, no establecer horarios para comer puede provocar un desorden en el metabolismo de los niños, afectar su concentración y energía. Es importante que los padres fomenten este orden desde pequeños, para que se vaya convirtiendo en un hábito”, explicó Evelyn Figueroa, nutricionista de Aramark.
4 de cada 10 personas con menores de edad bajo su responsabilidad reconoció que alimenta a los niños frente a una pantalla, siendo considerado el peor hábito que mantienen en materia de alimentación, seguido por el consumo excesivo de alimentos azucarados. Estas dos costumbres son al mismo tiempo consideradas las más perjudiciales. “Comer sin distracciones como pantallas es muy relevante, sino los niños lo hacen con más rapidez y cuesta que sientan saciedad, lo que los puede llevar a ingerir posteriormente alimentos menos adecuados para su dieta y en exceso”, comentó Figueroa.
Según estos encuestados, un 79% de los niños presenta algún problema relacionado con la alimentación, siendo el rechazo a comer ciertos alimentos el más común, seguido por la ingesta muy rápida o lenta y el rechazo a alimentos por su textura. Las verduras y las legumbres fueron mencionados como los alimentos más difíciles de introducir en la dieta de los menores. Mientras que las estrategias más usadas para lograrlo son el nunca dejar de ofrecerlos, así como innovar con preparaciones que incluyan los alimentos rechazados.
“Algunos tips útiles para lograr introducir ciertos alimentos en la dieta de los niños es que vean que sus padres y otros adultos los comen. Tampoco hay que forzarlos u obligarlos, sí seguir intentándolo un par de días después”, recalcó la nutricionista.
Cómo innovar con las colaciones
Con esta vuelta a clases, las colaciones son un elemento clave en la alimentación de los niños. Para incentivar una alimentación balanceada y saludable, los expertos de Aramark sugieren una serie de recetas de snacks nutritivos para ayudar a padres y cuidadores en la gran tarea de ir mejorando los hábitos alimenticios de los menores.
Recetario Vuelta a clases: ¡sano y entretenido!
Galletones de avena
Ingredientes
1 huevo, 2 tazas de avena, ½ taza de mantequilla, 2 tazas de harina de trigo o de avena, 1 taza de azúcar flor, 1 cdta. de polvos de hornear, 1 cdta. de vainilla, 1/3 taza de nueces.
Preparación
- Precalentar el horno a 180°C.
- Batir la mantequilla con el azúcar, agregar el huevo y la vainilla.
- Incorporar el resto de los ingredientes y mezclar.
- Formar bolitas de 5 cms. sobre papel mantequilla o la lata del horno previamente enmantequillada y hornear por 10 a 15 minutos.
Bocados energéticos
Ingredientes: 1 taza de almendras, 1 taza de dátiles sin carozo, 1 cda. de aceite de coco, 2 cda. de cacao amargo, coco rallado o en escamas a gusto.
Preparación:
- Mezclar los dátiles, las almendras y el aceite de coco y molerlos en una procesadora.
- Agregar el cacao amargo, el coco y mezclar.
- Formar bolitas del tamaño de una nuez, refrigerar.
