Muchas pueden ser las causas por la que una persona puede encontrarse en “situación de calle”, un mundo sin salidas, una triste realidad que aumenta poco a poco y que los sumerge en un “oscuro dolor” del que no pueden salir, por lo que es necesario el apoyo incondicional de la familia y la sociedad, que muchas veces los deja solos en este duro camino.
Si bien, todas las historias son distintas, una más cruel que otras, pero con un mismo resultado, deambular sin rumbo y de la mano de Dios.
Para Carol Calderón Gutiérrez, jefa de Operación Social Territorial de la Fundación Hogar de Cristo en Copiapó, indicó que “de acuerdo a nuestra experiencia hemos podido recoger en evidencia, que ellos han vivido una experiencia traumática como la pérdida de un ser querido, desvinculación familiar, entre otras cosas que influyen en el desencadenamiento de esta situación compleja”.
Esta situación es solo el inicio debido a que se puede desencadenar una serie eventos, que complican aún más la crisis por la que pasa la persona en situación de calle, puntualizó.
Respecto a las causas de este problema, Marcelo González, Encargado Regional del Programa Calle de Copiapó, destacó que “el tema de las personas que se encuentran en situación de calle obedece a un contexto muy amplio, porque la región atrae a muchas personas, capital humano calificado y no calificado, que buscan oportunidades de mejorar su calidad de vida y de acceder a la serie de empleos menores que las empresas de servicios desarrollan en la comuna”.
González recalcó que están operando a través de un ejecutor de la Universidad Santo Tomas, quienes se adjudicaron en el año 2018 este programa. En el mismo, los usuarios firman una carta de compromiso y un plan de intervención por 24 meses. Además están sujetos a todos los beneficios que establece el sistema de seguridad y oportunidades, que forma parte del sistema de protección social.
Atención Social
Por su parte, Raúl Martinez Muñoz, seremi de Desarrollo Social y Familia Atacama, afirmó que “este es un problema bastante grande que nosotros estamos atendiendo, debido a lo difícil del manejo de las personas que están en situación de calle”.
Detalló que “ellos tienen muchas facilidades debido a que se derogó en el año 1952 el hecho de que dormir en la calle sea una pena. De tal manera que la Policía de Investigaciones, Carabineros o algún ciudadano no tienen potestad para sacarlos cuando están durmiendo en la calle”.
El representante de la cartera, agregó que “a pesar de esta limitante en el programa, hemos tenido un 12% y 15% de éxito en este sentido, debido a lo difícil que es lograr estos avances, por lo que nos sentimos satisfechos de estos aciertos positivos del programa”.
De la mano del necesitado
La jefa de Operación Social Territorial de la Fundación Hogar de Cristo en Copiapó, explicó que “esta una fundación que busca la causa de justicia social con las personas más destruidas de nuestra sociedad. Hoy día, en la Región de Atacama tenemos distintos programas donde trabajamos las áreas temáticas como lo son: educación inicial, sala cuna, adulto mayor, personas en situación de calle, entre otras.
Resaltó que “tenemos grupos prioritarios donde activamos dispositivos que contribuyen al desarrollo de esas personas que se encuentran en situación de exclusión, pero sobre todo en situación de calle, por lo que tenemos hospedería donde puedan pernoctar, que tengan lugares donde ellos puedan pasar la noche bajo techo, pero también tenemos casas de acogida y de algunos programas más ambulatorios, donde se pueden intervenir con ellos en poder restituir algunas problemáticas que ellos presentan o daños que han adquirido”.
Calderón Gutiérrez, insistió que “nosotros creemos que la cifra ha aumentado significativamente, por lo tanto, cada vez que nosotros ofrecemos nuestros dispositivos, se quedan escasos debido al aumento de la población y los tipos de requerimientos”.
Señaló que desean trabajar con el Estado y otras organizaciones privadas, para generar políticas con la que las personas puedan tener trayectorias muchos más inclusivos. “Es decir, que no sean proyectos transitorios y que permitan palear las necesidades básicas de estas personas”, puntualizó.
La encargada de la Fundación se refirió a que hoy día los proyectos son muy ambulatorios y no dan respuestas a los requerimientos. “El promedio de vida en calle son seis años, por lo tanto ya presentan un daño significativo que necesita ser abordado, pero no de una manera superficial”.
Calderón insistió que estos programas y el apoyo de la familia, son fundamentales para lograr efectos positivos en las personas, que por cualquier razón, se encuentren en situación de calle.
Plan Invierno y Techo Primero
El encargado Regional del Programa Calle de Copiapó, que hay un estimado de 600 personas en situación de calle en la Región de Atacama, por lo que se están desarrollando estrategias para disminuir esa condición en las comunas más afectadas.
Al respecto, Calderón detalló en cuales comunas cuentan con hospedajes, y otros programas que se reafirman para el verano, como parte del trabajo en conjunto con el gobierno regional.
Igualmente, se estará implementando el programa Techo Primero, que significará tener un lugar donde las personas de calle puedan asistir libremente a asearse, cambiarse de ropa, donde algún profesional los atienda, se les consigan horas médicas, odontológicas, entre otros beneficios.
Finalmente, la situación de calle, o incapacidad de un individuo para proveerse un hogar debido a inhabilidad económica, es un conflicto muy complejo y desafiante. Se presenta en la mayoría de los países y trae consigo consecuencias tan negativas como preocupantes. En Chile la cantidad de personas en situación de calle supera las 15 mil personas, y el carácter estructural de sus causas no permite erradicarlo ni atacar el problema desde su origen, pero hacerlo de lado, o hacernos los indiferentes, tampoco.
Solo queda luchar hombro a hombro, para enfrentar los obstáculos que se presenten en el camino.
