Tres policías murieron y otros siete resultaron heridos el pasado viernesen un atentado con explosivos contra una estación policial en Santander de Quilichao, un municipio enclavado en una conflictiva zona del suroeste de Colombia.
“Fue un atentado contra la estación de policía con cilindros (de gas) puestos en una rampa que lastimosamente nos deja en este momento tres muertos y siete heridos”, dos de ellos de gravedad, dijo el secretario de gobierno Jaime Asprilla.
El funcionario descartó que el ataque, ocurrido alrededor de las 21:00 horas locales, tenga relación con las protestas que sacuden al gobierno de Iván Duque, y lo atribuyó a grupos armados que operan en el convulso departamento del Cauca, al que pertenece Santander de Quilichao.
“Es un atentado de grupos organizados que manejan recursos y que tienen que ver con el tema de la droga”, agregó.
Asprilla aseguró que la alcaldía decretará toque de queda hasta el domingo para garantizar el orden público y la seguridad de los habitantes.
Disidentes de la exguerrilla FARC, rebeldes del ELN y bandas narco de origen paramilitar se disputan el control territorial del Cauca, que tiene miles de hectáreas sembradas de narcocultivos y es una salida estratégica de droga por el Pacífico con rumbo a Estados Unidos.
El gobierno de Duque relaciona la violencia en el Cauca con el narcotráfico y “el crecimiento exponencial” de narcocultivos de los últimos años, que alcanzaron 169.000 hectáreas en 2018, según la ONU.
Tras décadas de persecución a las drogas, Colombia sigue siendo el principal productor de cocaína y Estados Unidos, su mayor consumidor.
Fuente: 24horas.cl