A través de un innovador proyecto, la gerencia Refinería de la división Chuquicamata comenzó a incorporar en sus procesos la inteligencia artificial. Esto, mediante un sistema computacional que es capaz de monitorear variables en tiempo real, generar alertas, recomendaciones operacionales y en general, mayor precisión en los procesos.
La iniciativa es parte de un trabajo conjunto entre Codelco y la Pontificia Universidad Católica de Chile y fue financiada mediante un fondo de fomento de desarrollo científico y tecnológico. Esto permitió que el trabajo perdurara por aproximadamente un año y medio, en el cual la TICA y los equipos de la Refinería se interiorizaran de su aplicación.
Proyecto
El proyecto consistió en el desarrollo de un sistema computacional siguiendo la arquitectura denominada «Internet Industrial de las Cosas» (IIoT, por su sigla en inglés), capaz de clasificar en tiempo real el estado de operación de la Refinería, en base a modelos operacionales identificados a partir de datos históricos.
Utilizando técnicas de Machine Learning para Big Data (una disciplina científica del ámbito de la Inteligencia Artificial que crea sistemas que aprenden automáticamente), se logró proporcionar recomendaciones operacionales en tiempo real que buscaron optimizar el desempeño del proceso. De este modo, la plataforma se integró directamente con los sistemas de automatización existentes, sin emplear instrumentación adicional ni equipamiento especializado.
El ingeniero experto de la superintendencia de Ingeniería de Procesos de la gerencia Refinería, Germán Wastavino, se refirió a la forma en que este proyecto está alineado con la estrategia del área de negocios: «El principal logro fue avanzar en el conocimiento de técnicas y herramientas avanzadas de automatización, que nos permitan controlar de la mejor forma posible nuestros procesos y de esta manera mejorar el desempeño de nuestras operaciones como negocio sustentable y competitivo».
La metodología propuesta integró modelos predictivos con sistemas de apoyo a las decisiones y adquisición de datos en línea. Esto, para generar predicciones de variables en base diaria y a final de cada ciclo catódico.
En este sentido, la participación de la TICA de Chuquicamata fue fundamental, ya que esta unidad puso a disposición de los profesionales de la universidad la información y herramientas tecnológicas requeridas.
«Tienes mucha información que va quedando en alguna parte. Hoy, la estamos recibiendo, interpretando y aplicándola para mejorar las operaciones y los distintos procesos. Entonces, la información tiene un valor y lo vemos reflejado en el producto», concluyó el ingeniero especialista TICA, Juan Carlos Villagrán.
Fuente: portalminero.cl