Será la Noche Alba más custodiada de la historia. Nunca antes el evento de presentación del plantel de Colo Colo, que se realiza desde 1992, requirió tanta atención en materia de seguridad. Siempre se trató de un evento al que se podía ir en familia. Incluso, sin un partido formal de por medio, pues en varias ocasiones se trató, literalmente, de una práctica con público.
La de hoy, en rigor, ni siquiera será Noche Alba. El partido entre los albos y la selección Sub 23 que se prepara para el Preolímpico de Colombia, comenzará a las 19 horas. Dos horas antes arrancará un espectáculo artístico que incluye a Américo como artista estelar. No habrá pirotecnia. La necesidad de garantizar la seguridad de los asistentes y el entorno, en función de las amenazas de la Garra Blanca, que a través de las redes sociales convocó a boicotear el evento por la situación social que atraviesa el país, obliga a los organizadores a ser cautelosos. “Sin justicia no hay Noche Alba”, postearon.
En el Monumental y en los alrededores, el plan de reguardo será similar al que se despliega en un Superclásico. Los albos solicitaron autorización para recibir a 40 mil personas, por lo que debieron contratar a 370 guardias, quienes, en conjunto con los efectivos de Carabineros, se encargarán de velar por el normal desarrollo del espectáculo. En el ingreso habrá controles biométricos para detectar la presencia de fanáticos que tengan prohibición de ingreso. Esa medida es una de las razones por las que ha reclamado la barra brava del Cacique. El enfrentamiento de hinchas albos y azules en las últimas horas es otro factor que urge.
En Macul los preparativos comenzaron con varias horas de antelación. El viernes por la noche, de hecho, se realizó el ‘sellado’ del recinto deportivo, una de las peticiones que plantearon las autoridades. En términos prácticos, una revisión exhaustiva para detectar la eventual presencia de elementos prohibidos. Desde esa hora, nadie puede ingresar al coliseo.
De cualquier forma, como sí suele ocurrir tradicionalmente en la Noche Alba, la principal inquietud de los aficionados radica en la presencia de un eventual ‘tapado’. Los albos ya han sumado cuatro refuerzos. El que más impacto producto es el retorno de Matías Fernández después de 13 años. Al volante se suman Miguel Pinto, César Fuentes y Leonardo Valencia.
El plantel de Mario Salas aún no está completo. El Comandante pretende el fichaje de un centrodelantero para dar por satisfechas sus necesidades. La misión no ha resultado fácil para Blanco y Negro. En la concesionaria veían complejo presentar un delantero de área en la Noche Alba. Nicolás Blandi y Lucas Viatri, las opciones que manejaron con más fuerza parecen más cerca de continuar sus carreras en Argentina. La búsqueda persistirá más allá de la primera actividad formal del año. Solo después de resolver esa plaza, Salas revisaría la opción de fortalecer otra posición.
FUENTE LA TERCERA