La necesidad de ayudar de manera urgente llevó a la agrupación del Club Deportivo Karate Pedro León Gallo “Fudoshin” a organizarse y generar la iniciativa solidaria de crear mascarillas para otros jóvenes y adultos mayores en riesgo social, sin tener que exponerse, ni exponer a otras familias.
Flor Veliz Contreras, nos relató como partió toda esta cadena organizativa para colaborar con la sociedad civil “ la verdad de las cosas todo partió desde que Injuv nos llamó para preguntarnos como estaban los jóvenes de nuestra organización, nos comentaron que estaban llamando a todas las organizaciones, para saber cómo estaban cada uno de los integrantes y sus familias, después nos mencionaron que existía un manual para efectuar mascarillas, pero la idea es que los jóvenes se cuiden y se mantengan en casa. Después del llamado desde Injuv, nos quedó más que claro de qué forma ayudar, por lo mismo nuestro Sensei se contactó con los jóvenes y decidieron trabajar desde sus casas, algunos jóvenes diseñaban las medidas para corte, otros efectuaban el corte, mientras que Francyni y Lleysi junto a su abuelita, nos apoyaban en la costura. Todo ha sido un trabajo en equipo sin exponernos, cada uno tiene clara sus funciones, la mia por ejemplo es efectuar las compras, entregarles el material y posteriormente retiro todo para que se efectué sanitización y sellado a través de la selladora de bolsas que tiene Efrain”.
La agrupación ya ha creado más de 200 mascarillas de tela TNT, le pidieron a Injuv apoyo en la logística de entrega a familias de Campamento de forma gratuita para quienes de verdad las necesite y colaboración en temas de telas recicladas.
Todo comenzó hace dos semanas. La primera meta que se trazaron los jóvenes fueron 50 unidades para familias de campamento. Y, después de eso, no paramos como agrupación nos señala Jackson Ramírez, aunque se les están acabando los materiales , según explican estamos utilizando materia prima reciclada, pero también invitamos a la comunidad que de forma desinteresada y , cada vez más rápido entre todos podemos ser parte de la solución y continuar ayudando a las necesidades de diferentes campamentos u grupos de riesgo y particulares, entre ellos a algún vecino que forma parte de los denominados “grupos de alto riesgo y nosotros acá como agrupación estamos dispuestos a generar mascarillas y los invitamos si quieren a sumarse con materiales”.
Por su parte Francisca Zárate directora Instituto Nacional de la Juventud resalta la importancia del catastro de voluntariado y que nuestra región continua siendo la primera en demostrar capacidad y voluntad ante una catástrofe “ El voluntariado nos transforma a todos: a nivel personal nos ayuda a desarrollar y potenciar habilidades humanas, como sociedad nos lleva a armar redes, innovar y generar cohesión social y nossentimos como equipos muy felices de saber que organizaciones juveniles cuenten con el criterio de querer contribuir frente a la pandemia, pero sin tener que exponerse lo jóvenes , ni exponer a sus familias, sino que aprender que se puede efectuar un voluntariado de amor y acción desde el hogar y contribuir con diversas personas de la sociedad civil, pero además aquellos jóvenes que viven con adultos mayores, los están incorporando en este voluntariado en materia de costura lo cual lo encuentro loable, porque ese es el espíritu y accionar de las agrupaciones de voluntariado y en especial destacó la eficiencia, logística y la confianza de esta agrupación, nosotros como equipo Injuv Atacama somos un puente como nos señaló el Intendente Urquieta para contribuir con los jóvenes de toda la región, cuidándonos entre todos ”.
Para la coordinadora de Senama Ada Bassi quien trabaja de manera vinculante junto a Injuv en la entrega de estas mascarillas y levantamiento de nuevas necesidades de los grupos de adultos mayores en Campamento aseveró “ Es muy destacable que las familias y jóvenes se organicen para fabricar artesanalmente las mascarillas para nuestros adultos mayores, les hacemos el llamado a toda la región a generar acciones con el resguardo necesario, existen diversas formas de efectuar cruzadas solidarias y demostrar el rostro más amable entre todos ante esta pandemia y por supuesto en beneficio de quienes hoy son el grupo de mayor riesgo frente al COVID-19. Nosotros contamos también con la campaña “APADRINA A UNA PERSONA MAYOR” donde los vecinos son nuestros mejores aliados y en caso de alguna necesidad de contención emocional debido al contexto actual en que viven los mayores, tenemos habilitada la línea Fono Mayor 800 400 035, donde además de contención pueden resolver dudas y solicitar distintos apoyos, los cuales resolvemos de manera conjunta con nuestros servicios aliados en esta cruzada, como lo estamos desarrollando en el Campamento Candelaria junto a Injuv.”
En esta ocasión, las mascarillas de tela TNT fueron a parar en las manos de las 57 familias que viven en el Campamento Candelaria el cual dirige Doña Luisa Veliz, quien señalo “Estamos muy agradecidos porque los jóvenes de la agrupación Fukoshi que nos enviaron las mascarillas, porque las instituciones estén con nosotros, es una muestra maravillosa de solidaridad y que las autoridades vengan hasta terreno siendo el puente como fuimos conversando, nos da más tranquilidad, además de que el equipo de salud de la Universidad Santo Tomás haya pasado casa por casa, enseñándonos y nos entregan su número personal para cualquier cosa que necesitemos, eso igual que nos genera contención , no nos sentimos solos .
Para Silvia Gómez jefa de Carrera Universidad Santo Tomás “Tenemos un convenio de trabajo junto con Injuv y el Ministerio de Desarrollo Social, en educación de voluntariado y visitas técnicas para apoyar a la comunidad en técnicas de higienes junto a nuestras estudiantes de ultimo año, pero también efectuaremos colaboración con las familias de campamentos y los adultos mayores”.
La próxima semana se continuará haciendo entrega de más mascarillas que siguen generando los jóvenes de la agrupación en otros campamentos de la región, también se continuara con visitas técnicas por parte de los voluntarios de la Universidad Santo Tomás, Injuv y Senama.
Fuente: Francisca Zárate Medina
