José Tomás Andueza, consultor Senior de Transforme
En el periodo enero – abril 2020, 564 empresas iniciaron procesos de quiebra, según la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento, lo que significó un aumento de 11,5% con respecto al período anterior y que se espera que en estos meses se duplique esta cifra.
Es un hecho que el coronavirus ha obligado a las Pymes a digitalizarse, las ventas físicas han caído mas de 30% y las digitales se han triplicado. Si bien las grandes empresas también se han visto perjudicadas, muchas han tomado acciones para apoyar a las pymes colaborando para potenciar sus ventas y otorgando herramientas para definir una estrategia digital.
La principal problemática de la pyme es vender, ¿cómo llego a una base más grande de clientes? Potenciando su propio canal o apalancándose en el de otro. Pero acceder al canal de una empresa grande no es fácil ni barato. Es aquí donde los grandes tienen una muy buena oportunidad para innovar y adoptar una estrategia más colaborativa, dando visibilidad y condiciones apropiadas a este segmento. Algunas empresas ya han empezado a apoyar a las pymes. Por ejemplo, Falabella, Sodimac y Linio, quienes abrieron sus plataformas de Marketplace de forma gratuita (no cobrarán comisión por 3 meses) a nuevas microempresas, junto a una capacitación de e-commerce. Otro ejemplo de compartir el canal es Salcobrand quienes desde marzo ofrece espacio en sus tiendas para emprendedores.
Otro punto importante es la necesidad de las PYMEs de evaluar sus actuales modelos de negocios de las PYME, el qué, el cómo y el porqué de sus propuesta de valor, como también utilizar nuevas tecnologías para potenciar o rediseñarlos. Existen muchas herramientas que antes eran alcanzables sólo para las grandes compañías y que hoy en día, gracias al Internet, están al alcance de todos.
La disponibilidad de plataformas y aplicaciones digitales gratis o de bajo costo es inmensa, y estar al nivel de una compañía grande depende de cada uno. Por ejemplo, Wix para crear páginas web, Mailchimp para e-marketing, Hotjar para analizar los viajes en la web de sus clientes, VWO para A/B test.
En resumen, una gran ventaja que tienen las pymes por sobre las empresas grandes, y que deben aprovechar en esta época, es su mayor capacidad para adaptarse, la ausencia de burocracias, procesos internos y rapidez en la toma de decisiones, lo que les da la oportunidad para realizar unos de los procesos claves de la innovación, la experimentación. Así, tienen la posibilidad de ir mejorando o añadiendo productos o servicios que refuercen su propuesta de valor. Metodologías como Desingn Thinking o Lean Start up son algunas de las claves para llevar adelante este proceso.
