La destacada animadora de televisión, que conversó con Angélica Castro en el programa “Velvet al Desayuno” transmitido por el Instagram Live de @revista_velvet, dijo que lo más duro de la cuarentena ha sido estar lejos de su hermana y su mamá. Además, habló sobre su vida personal, la televisión y su restaurante “Casa Tunquén”.
Kathy Salosny, que por estos días se encuentra pasando la cuarentena sola en su casa, cuenta que estuvo acompañada este tiempo por amigos, pero que ahora último le ha tocado estar sola con sus perros, “el 4 de marzo estábamos celebrando el cumpleaños de mi hermana, fue la última vez que abracé…volvimos con el Toño mi amigo y nos confinamos aquí en mi casa…nos quedamos encerrados con el Toño la primera fase de la cuarentena, y él se fue y no me quería quedar sola y ahí se vino una amiga mía, estuve con ella un rato, estábamos trabajando y se tuvo que ir también…me ha tocado estar harto sola, estoy con mis perros”.
Dice que lo más duro de esta cuarentena ha sido estar lejos de su familia, “mi mamá y mi hermana viven en Algarrobo…ha sido duro, es un tema muy sensible para mí, no las veo desde el 13 de marzo, y mi mamá estuvo muy delicada de salud, está en un lugar exquisito porque tiene el mar ahí, eso lo agradezco, pero estuvimos muy preocupadas porque pasó un mes postrada. Ahora está bien, está súper hiperactiva. La extraño mucho, a mi hermana Marisol también, ya pasará todo esto…lo primero que voy hacer es agarrar mi auto e irme a Tunquén y pasar a ver a mi mamá”.
Kathy cuenta que está cesante y viviendo de sus ahorros, “la situación es muy tremenda Angélica, la angustia de la gente por la incertidumbre, son meses y meses muy pesados para las familias de Chile, yo en este minuto estoy cesante, estoy viviendo con mis ahorros, y los ahorros se acaban, tengo muchos privilegios porque mi casa es propia…si yo me angustio, imagínate el resto”.
Sobre la televisión, dice que ha sufrido discriminación por su edad y su físico, “uno ha sufrido esa discriminación por tener la edad que tiene, porque te empiezan a salir las arrugas, no es fácil, pero yo tengo un público duro y estuve hasta hace poco en la televisión a esta edad, pero es la industria que quiere rejuvenecer la pantalla…me lo dijeron en la cara: Kathy no vas a seguir acá porque queremos rejuvenecer la pantalla, para mí fue súper violento…una vez me dijeron que me tenía que poner pechugas…no así con los hombres, hay un nivel de exigencia muy brutal”.
Cuenta que tuvo que hacer un duelo cuando se dio cuenta que no quería tener hijos, “Cuando tienes historias tan traumáticas y duras, hay que buscar un camino de reparación, antes de pensar en proyectos de hijos…fue la mejor decisión que pude haber tomado. Empecé un proceso psicoanalítico, tuve crisis de pánico, todo esas fueron señales, no estaba en condiciones de formar familia. Fue pasando el tiempo, hice una terapia como de 18 años y en una sesión ella me dijo; tú no te haces cargo de que no quieres tener hijos y me puse a llorar, fue súper potente, tuve que hacer un duelo al hacerme cargo de eso…mi camino ha sido súper en solitario, soy una mujer super independiente”.
En relación a su restaurante Casa Tunquén, dice que está segura que volverá a abrir, “Se va a abrir, estoy segura que se va abrir Casa Tunquén, es un lugar de encuentro, la gente no se quiere ir cuando llega para allá…me fascina la energía del lugar (Tunquén), de hecho hay templos budistas, hay un campo energético, algo pasa ahí, todo eso me fue cautivando, además tengo grandes amigos que viven en Tunquén”.
Todos los días de cuarentena habrá un nuevo invitado en el programa “Velvet al Desayuno” animado por Angélica Castro. Lo puedes ver por el Instagram Live de @revista_velvet a las 10:00 hrs. De lunes a viernes.
FUENTE: VELVET.