La noticia explotó a inicio de semana. Aníbal Mosa, presidente de Colo Colo, había ofrecido un millonario premio a los jugadores del Cacique para no descender a la Primera B.
Específicamente serían 300 millones de pesos los que habría puesto en la mesa el regente popular para repartir en el camarín albo con el fin de salvar la categoría.
El elenco de Pedrero hoy estaría yéndose a la Primera B. Está colista dos puntos por debajo del penúltimo que es Coquimbo y a 5 unidades del antepenúltimo, Deportes Iquique.
La determinación de Mosa ha levantado mucho polvo al exterior del Monumental y específicamente en los históricos del club, quienes rechazan de plano la medida.
“Se enreda con lo que pasó en abril, con el seguro de cesantía. Da la impresión que esa vez no hicieron todo el esfuerzo, porque después aparecieron unos bonos, el premio de ahora… Habla de la desesperación que tienen Blanco y Negro y Aníbal Mosa. Los jugadores deben renunciar a ese premio; decir que los mueve el orgullo, no el dinero, y donar la plata”, dice enfático Patricio Yáñez en El Mercurio.
“Es una vergüenza. Le hace muy mal a Colo Colo, porque pierde su esencia que era recibir premios por ser campeón. Y no olvidemos los sueldos que se pagan hoy, nada que ver con los antiguos. Si antes uno llegaba al club no por representante y después de uno o dos años siendo el mejor en tu puesto. No pueden ofrecer plata por salvarse”, analiza Gabriel Mendoza.
En medio de todo esto, El Cacique se enteró ayer martes de que no jugará este fin de semana. Se suspendió el duelo con Unión La Calera y también el partido ante Coquimbo Unido, que había sido programado para el 30 de diciembre.
Fuente: Emol.com