La justicia argentina sentenció este miércoles a 12 años de cárcel al empresario Lázaro Báez por encabezar una trama de lavado de dinero obtenido por los contratos de obra pública adjudicados durante los Gobiernos kirchneristas (2003-2015), una causa conocida como “ruta del dinero K”.
Así lo decretó el Tribunal Oral Federal 4, poniendo de esta forma punto final a un juicio que arrancó hace más de dos años y que sentó en el banquillo de los acusados a Lázaro Báez, detenido desde 2016, y a más de una veintena de personas de su entorno, entre ellos sus cuatro hijos, Martín (en prisión desde febrero del 2019), Melina, Luciana y Leandro.
En la sentencia, los magistrados a cargo del tribunal establecieron “por mayoría” penas de 12 años de cárcel para Lázaro Báez, el principal acusado, por el delito de “lavado de activos agravado”, así como otros nueve para su hijo Martín, en carácter de “coautor”.
El trasfondo del juicio
La “ruta del dinero K” comenzó a investigarse en 2013, todavía con Cristina Fernández (2007-2015) en el poder, aunque el impulso definitivo llegó en marzo de 2016, ya con el conservador Mauricio Macri en la Presidencia y después de que un canal de televisión difundiera imágenes que mostraban a Martín Báez contando grandes sumas de dinero en las oficinas de una financiera de Buenos Aires.
Según la acusación del juicio, en los 12 años de mandatos de Kirchner y de su esposa se adjudicaron a Báez más de 50 obras, el 80 % del total, muchas de las cuales quedaron inacabadas, tuvieron sobreprecios o eran innecesarias.
Durante los dos años y cuatro meses que duró el juicio por esta causa, Lázaro Báez, detenido en medio de un gran operativo mediático en 2016 y que siguió la sentencia en arresto domiciliario, defendió su inocencia y afirmó ser “víctima” de una campaña orquestada por el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019).
“Yo fui, soy y seré amigo de Néstor Kirchner. Nuestro vínculo empieza con mucha anterioridad a que se convirtiera en un político trascendente, sin embargo esto no quiere decir bajo ningún concepto que yo fuera su testaferro, ni de él ni de su familia”, aseguró Báez a finales de 2019.
El juicio por la “ruta del dinero K” llegó a salpicar a la hoy vicepresidenta, Cristina Fernández, imputada por el fiscal Guillermo Marijuan, pero en noviembre de 2018 el juez Sebastián Casanello dictó “la falta de mérito de la ex Presidenta” al no tener pruebas suficientes sobre su implicación en este caso.
Los detalles del fallo
En la lectura del fallo, el juez Néstor Costabel anunció un total de 22 condenas a prisión, que van desde los dos años y seis meses de prisión hasta los doce que tendrá que cumplir en total Lázaro Báez.
El tribunal federal condenó a otros cinco años de cárcel al otro hijo del empresario, Leandro Báez, en carácter de “partícipe necesario” en el delito de lavado de activos, mientras que sus hijas Melina y Luciana Báez fueron sentenciadas a tres años de prisión por “partícipes secundarias” en dicho delito.
En cualquier caso, el cumplimiento de las condenas sobre Melina y Luciana “será dejado en suspenso”, aunque ambas tendrán que cumplir con las reglas de “fijar la residencia” y “someterse al cuidado de un patronazgo”.
También fueron dadas penas altas de prisión a los colaboradores más estrechos de Lázaro Báez, su abogado Jorge Chueco y su contador Daniel Pérez Galdín, quienes fueron condenados a ocho años de cárcel.
En el caso del empresario Jorge Leonardo Fariña, el tribunal rebajó su pena de ocho a cinco años de prisión por haber colaborado en la causa.
Asimismo, el juzgado federal mantendrá los embargos y ordenó decomisar “la totalidad de los bienes cautelados”, entre ellos sumas de casi 55 millones de dólares producto del lavado de activos.
De los 27 imputados en el juicio, tan solo cinco fueron absueltos.
En ese sentido, las penas sobre Lázaro Báez, su hijo mayor Martín, Chueco y Pérez Galdín son las mismas que pidió la Fiscalía a finales del julio pasado.
Fuente: Emol.com