La noche de este viernes, Luka Tudor, Marco Enríquez-Ominami, Juan Pablo Queraltó, Chiqui Aguayo y Francisca García-Huidobro fueron los nuevos invitados de Podemos Hablar en Chilevisión. Así, cada uno llegó para contar diferentes facetas y momentos de su vida.
Fue al inicio del programa cuando, al recordar diferentes historias que vivieron, el conductor del espacio, Jean Philippe Cretton, preguntó si alguna vez alguien se sintió traicionado en el ambiente laboral.
Fue entonces que García-Huidobro dio un paso al frente, recordando uno de los momentos más públicos de su vida personal. “La traición mía fue muy pública”, comenzó diciendo, para entonces explicar que todo ocurrió en 2006, cuando la animadora trabajaba en el extinto SQP.
“Yo me Separé de Julio César. Quizá unos no recuerdan, pero fue una separación muy escandalosa”, recordó la también actriz, que destacó que para entonces, la farándula era un fuerte de la televisión, por lo que aumentó aún más la cobertura sobre su estado tras el quiebre.
“En mi desesperación y completa ignorancia de cómo enfrentar esto, me fui a Buenos Aires, jurando que iba a pasar piola”, añadió entre risas, asegurando que esperaba alejarse de las cámaras por un tiempo.
Fue entonces cuando recordó que, para volver al país, decidió cambiar su pasaje en diversas oportunidades. “Joaquín tenía 3, 4 meses. Para que se entienda el estado en el que estaba, yo estaba muy flaca, mucho más de lo que soy normalmente”, añadió.
“Yo no entendía por qué la prensa se enteraba de cada vez que cambiaba mi pasaje. Luego descubrí que había sido mi jefa. Mi jefa le filtraba a la prensa la información”, lanzó, sorprendiendo a los presentes.
Así, Cretton le preguntó a la opinóloga si alguna vez conversó con su jefa de entonces sobre la situación, cosa que García-Huidobro afirmó.
“Le dije que se había equivocado, porque ella creyó que valía más como noticia que como panelista. Y la historia demostró que valía más como panelista”, aseguró.
Sin embargo, no todo quedó en la filtración a la prensa, ya que los problemas siguieron.
Según Francisca García-Huidobro, aquella persona incluso “me quería mandar de vacaciones porque quería decir que estaba en una clínica psiquiátrica”.
“Pero yo no, aquí me quedo y no me mueve nadie. Tuve la fortuna de irme, de poder salir de ahí y no tener que enfrentarme a nadie como ella nunca más”, concluyó.
Francisca García-Huidobro y la violencia que sufrió en televisión
De todas formas, la animadora afirmó que no volvió a tener contacto con aquella jefa tras su salida del espacio, aunque destacó que vivió diferentes momentos que, agradece, ya no ocurren en los medios.
“Nunca volveré a trabajar con esa persona. Por suerte nunca he tenido una invitación de ella. No tengo idea de qué hace hoy, pero ojalá que no trabaje con personas”, señaló.
En eso, también recordó que en más de una oportunidad reflexionó con Jennifer Warner respecto a lo violenta que era la televisión, no solo para los entrevistados, sino que para los animadores del espacio.
“Nos dimos cuenta de que permanentemente sufríamos violencia a través de la muela”, apuntó, refiriéndose a la herramienta con la que se comunican con la producción.
Sobre esto, apuntó que constantemente “decían cosas como: ‘oye, esta weona (sic.) está bajando el rating, sácala’. Eran muy violentos y fui víctima de esa violencia, que normalicé”.