Oposición y coalición de Gobierno se reunirán este viernes a las 11:00 con la ministra Ximena Aguilera para abordar las medidas legislativas que apunten a una solución para la crisis de estas instituciones.
La crisis que afecta a las isapres no ha dejado indiferentes a los parlamentarios de ningún sector: tanto oposición como oficialismo están sentados a la mesa con el Ministerio de Salud para abordar soluciones que eviten un perjuicio mayor para los más de tres millones de afiliados de este sistema, y tendrán su segunda reunión este viernes a las 11:00 con la ministra Ximena Aguilera.
La disposición de los parlamentarios de las comisiones de Salud de la Cámara y del Senado es llegar a alguna solución que se pueda tramitar mediante una ley corta en marzo, con lo que las reuniones de este mes serán clave para definir aquello.
Pero las miradas sobre cómo lograr aquello son distintas, y en sectores del oficialismo han sido tajantes en que el Ejecutivo no puede “salvar” a las isapres, sino que debe resguardar a los usuarios del sistema.
En esa línea, la ex ministra de Salud y diputada Helia Molina (PPD), asegura que “no creo que el Gobierno deba hacer salvatajes a las isapres que por décadas han tenido utilidades millonarias y no tengan un fondo de emergencias cuando hay uno o dos años malos, pero es imposible llevar a las personas a sufrir la falta de protección en salud, habrá que buscar mecanismos sinérgicos, que, a través de mecanismos transparentes, permitan que las personas que tienen contratos con la isapres no pierdan su derecho a la salud”.
Para Molina, la solución debe pasar por alianzas público-privadas como se mostraron durante la pandemia.
En tanto, el senador Juan Luis Castro (PS) manifiesta que no es que el Ejecutivo quiera “dejar caer” a las isapres, sino que “el Gobierno lo que quiere es impedir que los 3 millones de personas que están en isapres queden a la intemperie, sin cobertura, o que tengan que llegar al Fonasa de hoy que no tiene capacidad para mantener los niveles de planes de salud que tienen en lo privado”.
Por eso, remarca -y coincide- que el Ejecutivo busca dos cosas para enfrentar la crisis: “tener un Fonasa distinto, que permita tener seguros complementarios con planes que tengan redes de prestadores y que se acerquen a homologar lo que tiene la clase media para las isapres”.
“El segundo aspecto es intervenir el precio base de los planes, que la Suprema dijo que solo puede hacerse por ley. Por eso creo que es parte de la definición que el gobierno va a implementar”.
De acuerdo con Castro, la respuesta del Ejecutivo hasta ahora ha sido la correcta. “No le echemos la culpa al empedrado. En este tiempo el gobierno ha conversado con ellos, se está planteando un proyecto de ley, la Suprema les dio un plazo de seis meses que se cumple en mayo. Nadie está fuera del tablero. Son las isapres las que están amurradas”.
En ese marco, ya fuera del oficialismo pero también con una postura crítica sobre el rol de las isapres, el senador Iván Flores (DC) aseguró que se trata de un “chantaje” la estrategia que están tomando estas instituciones.
“Insisten en la estrategia de tirar el mantel cada vez que se les dice que no a una ley corta de salvataje o cada vez que se les dice que no habrá plata para ellos, para mantener su ineficiencia de gestión”, criticó Flores.
Por eso, afirmó que en este contexto “hay que repensar el sistema de salud chileno, se genera el momento para esa discusión. Y volver a rayar la cancha al mundo público y al privado y ver cómo fortalecemos al mundo público y cómo regulamos al mundo privado”.
“No al salvataje”
En tanto, la diputada Karol Cariola (PC) criticó hace un par de días las distintas ideas de parlamentarios que han planteado salvar a estas instituciones, porque según dijo, “el rol del Estado es resguardar a los usuarios y usuarias y no generar un salvataje económico a las isapres que han sido un negocio que ha lucrado por años a costa de la salud de los chilenos y chilenas y que ellos mismos han dejado claro que su sistema no está hecho para tratar a los enfermos, sino que solo a personas sanas, jóvenes y sin problemas. Esto da cuenta de que es un sistema que desde su inicio ha tenido un problema estructural y este es el momento de resolverlo”.
Por eso, la parlamentaria llamó al Gobierno “a tomar las medidas en el camino de lo que hemos venido discutiendo, que es la reforma de la salud, el fortalecimiento de la salud pública, el establecimiento de un sistema único de salud integrado y que permita y resguarde las condiciones de los usuarios de la salud privada”.
En la misma línea, la diputada Ana María Gazmuri (Ind. FA) plantea que “la sociedad chilena en su conjunto le ha pagado a las isapres a lo largo de 31 años $8,6 millones de millones, solo por administrar el sistema para los actuales 3,3 millones de beneficiarios. El gobierno tiene el deber de poner el foco en garantizar la continuidad en sus prestaciones a estos usuarios y no en el salvataje de las isapres, únicas responsables de la crisis en que se encuentran”.
También coincide su par de la Comisión de Salud de la Cámara, la diputada Danisa Astudillo (PS), que afirma que “por supuesto que no debe haber salvataje del Estado a las isapres, de lo que el Estado se debe preocupar es de los afiliados que hoy día podrían quedar sin cobertura. La Corte Suprema ha sido muy enfática en explicitar que la responsabilidad de la situación económica compleja que están viviendo algunas isapres es su propia responsabilidad, por lo tanto, a lo que nos convoca a nosotros los parlamentarios, sobre todo al Estado, es resguardar a los afiliados, a las personas, a las chilenos, a los chilenos”.
No obstante, en el oficialismo igual hay miradas algo más críticas con el actuar del Ejecutivo hasta ahora. “Creo que el Ministerio de Salud no dimensiona el catastrófico efecto que podría tener el no tomar medidas para enfrentar esta crisis, que no implica necesariamente salvar a las isapres, pero sí resguardar a sus afiliados y estabilizar el sistema mientras se busca una solución integral a nuestro sistema de salud, señala el presidente de la Comisión de Salud de la Cámara, Tomás Lagomarsino (PR).
Según el diputado, en el corto plazo deberían tomarse dos tipos de medidas: un primer grupo de medidas que permita resguardar a los afiliados de las isapres en cuanto a la continuidad de sus atenciones, en el caso de quiebra; y otro grupo, administrativas y/o legislativas, que permitan estabilizar en el corto plazo la crítica situación financiera.
Fuente: Emol
