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El caos que vivió la U, el reto de Quinteros y la furia contra Cristóbal Campos: Lo que no se vio del Superclásico

Fueron varios los hechos que marcaron el partido en el Monumental.

Se fue un nuevo Superclásico. Colo Colo y la U empataron sin goles en el Estadio Monumental. Fue un espectáculo pobre en la cancha.

Pero más allá de lo poco y nada que exhibieron en el campo, fuera de ella hubo una serie de hechos que marcaron la jornada. Acá los más destacados.

Agresión a la U

Polémica llegada del equipo azul al recinto de Macul. Los buses que traían a jugadores y cuerpo técnico fueron apedreados. Le lanzaron piedras que rompieron las ventanas. Y hubo más.

Al entrar al estadio, los directivos también fueron agredidos e insultados. El ingreso al palco fue caótico. Apenas unos guardias pudieron contener la ola de hinchas que se lanzaron contra los dirigentes. Cecilia Pérez fue una de las afectadas.

“Es muy condenable todo lo que vivimos. Atacaron el bus con plantel y dirigentes, hubo agresiones en el estadio, nos golpearon”, dijo la vicepresidenta de Azul Azul a ADN Radio.

El infiltrado

Resulta increíble, pero fue cierto. Hubo un hincha de la U que se atrevió a entrar con la camiseta del club hasta el sector de Océano. No estaba solo, iba con su pareja que era fanática del Cacique. El amor lo puede todo, dicen. Aunque el resultado no fue de los mejores.

Al forofo azul lo sacaron rápidamente del sector. Lo insultaron e increparon y terminó abandonando a la fuerza y entre una gran cantidad de objetos que le lanzaron.

El “odio” a Matías Zaldivia

Era esperable. Los hinchas de Colo Colo apuntaron antes, durante y después del partido contra el ahora defensa de la U y hasta el año pasado jugador albo. Los cánticos y los insultos estuvieron a la orden del día.

“Zaldivia conch… en el Colo te dimos de comer”, fue el cántico más repetido en el Monumental.

Pellegrino se cansó

El técnico de la U vivió a concho su primer Superclásico. Salió a reconocer el campo, saludó a los fanáticos del club y no paró de dar instrucciones y aleonar a sus jugadores durante el compromiso.

Pero hubo algo que lo tuvo inquieto por casi media hora: El micrófono de la transmisión oficial que estaba en su sector del área. Varias veces lo acomodó hasta que finalmente lo retiró bastante lejos de la parte en que estaba ubicado.

Indignación con Cristóbal Campos

Al portero de la U lo pifiaron todo el partido. Le recriminaron su lentitud en cada saque de fondo. Y él hizo su parte del juego. A tal punto que ya no solo los hinchas lo criticaron, también los rivales.

Esteban Pavez fue uno de los más enfurecidos con el meta azul. Lo encaró sobre el final para que apurara la reanudación y le pidió constantemente al árbitro que lo amonestara. Gustavo Quinteros también se quejó. “El árbitro estuvo muy bien, pero algo que le faltó fue la amarilla a Campos, que hizo tiempo desde el arranque”, lanzó el DT.

Incidentes

Desde antes del encuentro hubo enfrentamientos entre la barra de la U y fanáticos de Colo Colo. Los objetos iban y venían de un lado a otro. pero ya sobre el final, desde el lado albos lanzaron fuegos artificiales que cayeron directamente en la zona rival. Los fanáticos huyeron hacia un costado y otros arrancaron hacia la parte superior. Luego con una de las misma bengalas que recibieron, encendieron fuego en la tribuna.

Todo eso se sumó a la serie de incidentes a lo largo del partido con petados, bombas de ruido, piedras y vasos a la cancha, y hasta una cortaplumas.

Los encontrones

A lo largo del cotejo hubo varios cruces entre jugadores. Los roces más destacados fueron los que protagonizaron Leandro Benegnas con Luis Casanova, César Fuentes con Darío Osorio y Matías Zaldivia con Jordhy Thompson.

El último fue el más bullado por el pasado albo del defensor. Fue un cara a cara entre el defensa y el juvenil. “No pasa nada con el ‘enano’, lo conozco desde las 15 años cuando estaba en el primer equipo y todo bien”, dijo Zaldvia en zona mixta.

El reto de Quinteros

El DT albo no estaba contento. Su equipo tenía la pelota, buscaba, pero no daba con el gol. Y casi lo pillan mal parado de contra cuando Leonardo Gil perdió la pelota en el centro del campo con un pase errático.

Quinteros lo miró, lo llamó y le recriminó la demora en el pase, que casi termina con una opción clara de peligro para el rival.

Caos a la salida del plantel azul

Emotiva fue la despedida del equipo laico a su hinchada. El plantel completo con Pellegrino incluido, se fue a despedir de los fanáticos que llegaron hasta el Monumental.

Eso sí, cuando tocó abandonar el campo, los proyectiles cayeron con fuerza y en gran número por el túnel de salida de los azules. Guardias con tres paraguas se acercaron para ir protegiendo a los futbolistas, que en grupos y corriendo dejaron el césped.

Paredes, dueño de casa

El goleador histórico del fútbol chileno y emblema del Cacique asistió al Superclásico y se robó el “show”. Regaló fotos y autógrafos por montón, firmó camisetas y hasta comentó el encuentro con la transmisión oficial. Ya luego del duelo, se paseó por el recinto como si fuera su casa.

Paredes dejó el palco y caminó por los estacionamientos hasta el camarín albo. Saludó a todos los que conoció en su larga etapa en el club, desde directivos hasta guardias. Entró por el túnel de los vestuarios y se presentó para conversar con los jugadores y cuerpo técnico. Conversó con todos y luego, entre sonrisas, abandonó el sector.

Pavez, el rezagado

21:36 horas, más de 90 minutos desde terminado el encuentro y prácticamente se habían ido todos. Prácticamente porque había un jugador de Colo Colo que tardó una eternidad en salir del recinto: Esteban Pavez.

El volante fue el último futbolista en abandonar la zona de vestuarios. La prensa lo esperaba y valió la pena porque se detuvo a hablar. Eso sí, estaba afectado. “Son dos puntos perdidos, sentí siempre que lo íbamos a ganar. Queremos salir campeones y debemos ser fuertes de local, hoy perdimos dos puntos”, sentenció.

Fuente: Emol

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