Fuera del colegio donde trabaja hace 23 años es toda una atleta. El montañismo es su pasión y quiere lograr subir las Siete Cumbres, las más altas de cada continente.
“Yo soy una mujer muy soñadora”. Así se describe Loreto Marcela Biazevic -@lore7cimas-, de 48 años, “pero muy bien mantenidos” bromea.
Durante el recreo del colegio San Nicolás de Myra -donde trabaja- habla con Emol sobre su más grande sueño: Llegar a la cima del Monte Everest, ¿El problema? Significa mucho dinero, el que no tiene, por lo que está realizando una campaña para recaudar fondos.
“Empecé a soñar de chica”
Loreto es profesora de educación física egresada en 1999 de la Universidad Educares, actual Andrés Bello. Nació en Viña del Mar, pero a los meses se instaló en la Región Metropolitana. Actualmente vive en Providencia y trabaja hace 23 años en el mismo colegio.
Aproximadamente cuando tenía 12 años comenzó a subir “vallecitos” con su grupo de scout. “Yo sufría mucho porque aparte del agotamiento tenía temor a las alturas”, cuenta. Sin embargo, venció su miedo de una manera peculiar: “Siempre he sido de superar, más que evitar los miedos. Cuando vi que tenía mucho miedo a la altura y me gustaba esto de la montaña, no podían ir las dos cosas juntas. Entonces dije ‘no, esto se supera’ y me tiré en bungee”, relata a Emol.
Así continuó subiendo montañas cada vez más grandes. “Empecé a soñar de chica. Siempre veía el programa ‘La tierra en que vivimos’, ‘Al sur del mundo’, y decía ‘yo tengo que ir a las Torres del Paine, recorrer esto’. Lo encontraba tan primitivo, tan complejo que dije ‘esta cuestión la tengo que hacer de alguna manera'”, recuerda.
Inmersa en ese mundo fue que vio una serie donde se mostraba el trekking al campo base del Everest. En un comienzo lo consideró algo imposible, sin embargo, analizándolo, se dio cuenta que no lo era: “Económicamente se puede juntar las luquitas ahorrando y trabajando. Además, que mi madre me motivó diciendo ‘comadre cumple tu sueño ahora’ porque yo pretendía hacerlo después de jubilar y me dijo que después iba a estar con la rodilla hecha bolsa”.
De ese modo, con la ayuda de su madre, juntaron la plata y en 2014 realizó la primera parte de su sueño. En ese momento se prometió volver antes de diez años, los que se cumplen en 2024.
La profesora de educación física se propuso también realizar la Siete Cumbres (o Siete Cimas), es decir, subir las montañas más altas de cada continente -separando América del Norte y del Sur-, de las cuales lleva dos: el Aconcagua (2018) en Argentina y el Kilimanjaro (2019) en Tanzania, África. Luego comenzó la pandemia por lo que todo se paralizó. Ya cuando el mundo se había abierto, iba a subir el Monte Elbrus en Rusia, pero se desencadenó la guerra con Ucrania, por lo que también desistió.
Campaña para recaudar fondos
El pasado 10 de mayo Biazevic comenzó su campaña para recaudar fondos para poder viajar al Himalaya -entre China y Nepal- y cumplir su sueño.
“Es completamente impagable. Son alrededor de 50, 60 millones (de pesos) que uno tiene que gastar entre pasaje aéreo, seguro y el propio viaje que te sale solo 35 millones por parte baja. Yo lo voy a hacer bien a la chilena sin ningún tipo de lujo”, explica la docente.
A través de su Instagram @lore7cimas ha publicado todos los datos para poder ayudarla, además de subir un video donde se le puede ver vestida de blanco: “Mi sueño también era vestirme de blanco y lo hice en el video que mostré y fue entretenido. Al vestirme de blanco cumplí también uno de mis sueños. Y es mi matrimonio, me voy a casar con mis sueños”, dice.
Actualmente tiene un 0,4% de lo que necesita para poder llegar a la cima del Monte Everest. La mayoría han sido aportes de la comunidad escolar de San Nicolás de Myra a través de la página https://esponsor.com/loretobiazevic.
Biazevic se comprometió a estampar cada uno de los nombres de quienes le aportes para cumplir su sueño en una enorme bandera chilena. Esta la dejará en la cima del Monte Everest.
FUENTE EMOL