Los últimos días para la profesora Bernardita López no han sido fáciles. Esta docente jubilada vive en calle Mackenna, en la ciudad de Copiapó y el viernes recién pasado tuvo una caída en calle O´Higgins, donde camina a menudo para comprar su pan.
En el punto donde la señora Bernardita tuvo el accidente existe la base de una señalética arrancada de su base, manteniendo, parte de la estructura metálica, la que no es visible a simple vista, tanto así que esta es la segunda vez que tropieza.
Bernardita quedó con heridas y hematomas en su brazo y pierna, y aun con su dolor tras el golpe, fue al municipio copiapino para exponer la situación, y como vecina, solicitar el arreglo de la vereda, visita que fue tramitada de un lado a otro sin tener una recepción como corresponde y menos una respuesta satisfactoria.
Debido a esta mala experiencia en acercarse a las autoridades, la adulta mayor de 76 años de edad, a través de Nostálgica hizo el llamado para que pueda ser escuchada, y se pueda gestionar el arreglo, no solo de este punto en calle O’Higgins, sino que otros lugares en el centro de Copiapó donde existe el mismo problema y generando los mismos incidentes. Acción, como dice la profesora, no involucra una gran inversión monetaria, y solo es un tema de voluntad.
Perfectamente Bernardita podría perseguir acciones legales contra el municipio copiapino por el mal estado de las veredas que provocó esta caída, pero el espíritu de buena vecina es mayor y solo pide que sea escuchada y que se pueda reparar el lugar que gatilló su accidente.
Ahora las autoridades competentes tienen la misión de ponerse en acción y ser parte de la solución para esta vecina que solo quiere caminar tranquila por las veredas cerca de su casa.