Más de 3,6 millones de niños ucranianos, de los cuales 400.000 están desplazados en el extranjero, vuelven a las aulas este viernes, por segundo año desde que empezó la invasión rusa, según cifras de la presidencia ucraniana.
“El segundo 1º de septiembre tras la invasión a gran escala. Los rusos intentan todo para destruir nuestra nación […] La nación preservó la posibilidad de que los niños vayan a la escuela ucraniana”, declaró este viernes el jefe de la administración presidencial ucraniana, Andrii Yermak, en Telegram.
En este curso, “3.623.169 niños estudian en nuestras escuelas“, de los cuales 400.000 están en el extranjero aunque “permanecen en [el] sistema educativo” ucraniano, precisó.
Un 44,9% de los alumnos se beneficiarán de clases presenciales, un 24,4% estudiará a distancia y un 30,7% lo hará de forma mixta, detalló.
Según Yermak, 3.750 escuelas fueron destruidas “por misiles y bombas rusas” desde que empezó el conflicto, en febrero de 2022.
Actualmente, los combates se concentran en el este y en el sur del país, pero las grandes ciudades alejadas de las línea del frente son objeto de bombardeos rusos frecuentes, con misiles o con drones explosivos.
El miércoles, se produjo un ataque “masivo” en Kiev que dejó dos muertos y que fue calificado como el más importante contra la capital “desde la primavera” boreal por las autoridades militares.
En algunas grandes ciudades se habilitaron refugios subterráneos para que los profesores puedan dar clase si se activan las alarmas por posibles bombardeos.
“Los alumnos y los profesores están obligados a adaptarse a esta realidad“, declaró el comandante en jefe del ejército ucraniano, Valery Zaluzhny, en Telegram.
“Pero lo principal es que nuestros niños estudien […] Porque el conocimiento y la cultura son lo que nos distingue del enemigo”, sostuvo.
El ejército ucraniano emprendió en junio una contraofensiva en el sur y en el este del país para intentar recuperar los territorios ocupados por las fuerzas rusas.
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