Luego de la denominada “tormenta de relave” que afectó a Tierra Amarilla hace unas semanas, desde el municipio de esta comuna se solicitó un estudio particular independiente gestionado por la casa edilicia, donde se conocieron los resultados estos días. Conclusiones que se expusieron a las principales autoridades regionales durante este lunes, con el objetivo de corroborar la situación de contaminación que afecta al territorio minero.
El alcalde Cristóbal Zúñiga llegó hasta el edificio Pedro León gallo, que alberga la Delegación Presidencial de Atacama para reunirse con el delegado Cristhian Fuentes, detallando algunos puntos de este análisis medioambiental, donde se pudo ver la presencia de metales como cadmio, vanadio, plomo, arsénico y cobre, en algunos casos, incumpliendo, por lejos, la norma.
El alcalde Zúñiga indicó que, debido a esta situación, junto con validar estos estudios con universidades, gestionará recursos para poder instalar estaciones medioambientales de monitoreo, ya que, de acuerdo al edil, el Estado no posee en Tierra Amarilla, validando los datos que son entregados por las mismas compañías mineras.
En la reunión con la autoridad regional, se expuso la situación que Zúñiga cataloga como una “catástrofe”, solicitando otro estudio al gobierno para contrastar los datos arrojados por el análisis enviado a preparar por el municipio, incluso proponiendo que desde el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) Atacama se pueda actuar declarando alguna emergencia para la activación de recursos para abordar la situación.
Luego de la reunión con la autoridad regional, el alcalde Cristóbal Zúñiga se dirigió hasta el edificio Don Elías, que alberga la Seremi de Salud Atacama, lugar donde protocolizó la denuncia formal por daño ambiental, además viajará hasta la capital para reunirse con ministros planteando la situación que vive la comunidad tierramarillana.