- Los trabajos tendrán un plazo de 10 días y un costo de $12.911.059. La idea es que Mario Irarrázabal, su autor, cree una réplica a menor escala.
Esta semana comenzaron las obras de desarme y remoción del Monumento a la Solidaridad, escultura de cobre hecha por el reconocido artista Mario Irarrázabal y ubicada en el bandejón central de la avenida Argentina, frente al Congreso. Esto, a raíz de un informe de la Dirección de Operaciones de la Municipalidad de Valparaíso que da cuenta del peligro inminente de caída y desprendimiento de parte de la estructura, que puede dañar y afectar la seguridad de las personas que transitan y trabajan en el lugar.
La escultura fue inaugurada en 1995 y el 29 de febrero de 2020 fue incendiada en el marco del estallido social. Los trabajos de demolición tendrán un plazo de 10 días y un costo de $12.911.059.
Según consignó El Mercurio de Valparaíso, el alcalde de esa ciudad, Jorge Sharp, señaló en redes sociales que “tomamos contacto con Mario Irarrázabal, autor de la obra, quien manifestó estar de acuerdo por la decisión ya que una posible reparación es difícil por razones técnicas. Trabajaremos con Mario para crear una réplica a menor escala”.
Asimismo, el jefe comunal detalló que “el cobre recuperado de la obra se destinará para trabajos y creaciones de escultores y escultoras porteñas de la Escuela Municipal de Bellas Artes”.
“No hay cómo repararla”
Por su parte, Irarrázabal dijo estar “de acuerdo, y es triste, pero no queda otra. No hay cómo repararla ahora”. Precisó que el monumento “tiene una estructura interna de acero bastante fuerte, pero todo el resto era de madera y con el incendio se dañó, y recuperar eso no tenía sentido, sería un trabajo de locos y no iba a durar mucho tampoco, entonces no quedaba otra, para mí es bien triste”.
Por otro lado, añadió que “lo que me da mucha pena es que las personas que hicieron ese atentado yo no sé en qué diablos estaban pensando. Yo soy partidario de la no violencia, entonces no tengo resentimiento, pero ojalá ellos pudieran darse cuenta de la brutalidad que hicieron”.
En tanto, el concejal Gonzalo García, presidente de la comisión de Patrimonio, señaló que “este tema se tocó bastante en comisiones anteriores, de hecho fue uno de las primeras que tomé cuando recién asumí el cargo, se estaba considerando que esto era un riesgo, que en cualquier momento se podía caer, porque dentro de la estructura estaba con madera, eso es lo que se había quemado anteriormente y fue lo que produjo este daño de esta escultura, entonces, según los informes que estaban, repararla iba a ser mucho más caro que lo que costaba demoler; el mismo escultor, a quien nosotros también propusimos que diera el visto bueno, fue el que autorizó”.
No obstante, adelantó que hoy “en el concejo quiero tocar el tema para que den mayor información. Si lo miramos por un lado, lo positivo es que se va a trabajar en un lugar donde estaba una imagen dañada para Valparaíso, era una de las tristezas que teníamos entrando a la ciudad”.
No se habló en concejo
Por su parte, el concejal Dante Iturrieta indicó que en el Concejo Municipal “no se ha informado nada ni del sector patrimonial ni del sector de monumentos, no hemos tenido ninguna noticia, salvo que en el viaje que hace uno por la ciudad se encuentra con esta situación”.
El edil adelantó que también hará la consulta en el concejo de hoy, y estima que el monumento “como estaba, sí implicaba algún peligro para la ciudadanía, la decisión es correcta”.
En tanto, el hijo ilustre de Valparaíso Lautaro Triviño lamentó que “no es el primer caso y vamos como en una escalada de que, ya que lo destruyeron, que se pierda no más. Ahí tenemos el monumento a la Iglesia Evangélica en la plaza O’Higgins; el otro que era del mismo conjunto de Mario Irarrázabal que también estaba en la plaza O’Higgins y se perdió porque estaba lleno de termitas; y la innumerable cantidad de placas. Entonces es como una pérdida en que uno va asumiendo y asumiendo que cosas que se pierden ya no se reparan, aparte de la conciencia de destruir no hay una conciencia de mantener, preservar, rescatar o restaurar, todo es como lo más fácil”.
Lo planteará en comisión
A su vez, el diputado Hotuiti Teao señaló que “como integrante de la comisión de Cultura, Artes y Comunicaciones, me preocupa la demolición del Monumento a la Solidaridad por dos motivos. El primero, es sabido que restaurar siempre es más caro que demoler, pero bajo esa premisa, no tendríamos hoy cientos de elementos históricos conservados cuyo valor radica precisamente en dejar a las futuras generaciones vestigios de lo que es nuestra cultura e identidad nacional”.
Por otra parte, cuestionó que “si desde el 2021 se sabía que era más caro restaurar que demoler, lamento la falta de operatividad de la municipalidad que esperó casi tres años para tomar una determinación, pues claramente demoler hoy es mucho más caro que haberlo hecho en ese momento. En mi rol fiscalizador, no dejaré de plantearlo en la comisión que integro, pues su valor histórico lo amerita”.
FUENTE EMOL.