Durante la madrugada de este jueves, dejó de existir don Mario Toro, destacado copiapino, auditor y amigo de Nostálgica, luego de una serie de episodios que lo mantenían con un delicado estado de salud en los últimos años.
Don Mario Toro, residente tradicional del centro de la ciudad de Copiapó, se desarrolló en varias áreas, como la cultura, el comercio y como emprendedor del rubro del cortinaje y decoración.
Proveniente de una familia de trabajo, heredó de su padre el conocimiento del mundo de la sastrería. Participó activamente en grupos de proyección folclórica, con los cuales viajó a diferentes lugares de Chile, llevando el nombre de Copiapó.
En sus años de juventud trabajó en varias tiendas tradicionales del centro de Copiapó, donde pasó por muchas anécdotas, propias del comercio, pero siempre destacándose por su trato amable y gentil.
Su preocupación permanente fue siempre su esposa, de la cual contaba a sus más cercanos, la manera en que se habían conocido y como el amor los mantuvo muy unidos, pese a las adversidades de salud.
En Nostálgica participaba activamente como auditor, enviando mensajes a los distintos programas, haciendo sugerencias musicales, recordando el “Copiapó Antiguo”, mencionando las tiendas, el cine, zapaterías, panaderías y todo el comercio de los locales, los cuales muchos de ellos han desaparecido y solo un par se mantienen funcionando.
Mario Toro, como auditor de Nostálgica siempre fue amable, educado, de buen humor, de humor blanco; como conocedor de mucha música, solicitaba temas con historia, con letras significativas y de grandes voces y orquestas.
La partida de don Mario Toro, nos lleva a la reflexión y a la vez al recuerdo de otros de nuestros auditores que han dejado este mundo, y que se mantendrán en la memoria. Desde la Administración de Nostálgica y sus trabajadores, enviamos un abrazo fraterno a su familia y entregamos las condolencias en este momento del dolor de la pérdida.
