- Pese a no haber sido nominado nunca, recibió en 2017 un Oscar honorífico debido a su dilatada trayectoria.
Donald Sutherland, el ecléctico actor conocido por sus papeles en “Los doce del patíbulo” y “Los juegos del hambre”, murió a los 88 años, anunció el jueves su hijo Kiefer Sutherland.
“Con el corazón encogido anuncio la muerte de mi padre”, escribió Kiefer, también actor, en la red social X.
En una carrera de más de 50 años y unas 200 películas, Sutherland se consagró como un actor camaleónico, capaz de encarnar a grandes villanos, antihéroes y personajes románticos.
Gigante de 1,93 metros, era uno de los actores canadienses más famosos fuera de su país y recibió un Oscar honorífico en 2017.
“Nunca le intimidó un papel, fuera bueno, malo o feo”, lo describió su hijo. “Amaba lo que hacía y hacía lo que amaba, y no se puede pedir nada más. Una vida bien vivida”, añadió.
Su primer papel importante llegó en 1967 con “Los doce del patíbulo”, protagonizada por Charles Bronson.
Otros de sus éxitos fueron la comedia negra “M.A.S.H” (1970) y el thriller “Mi pasado me condena” (1971), de Alan Pakula, en el que interpretó a un detective privado en busca de un asesino perverso que amenaza a una prostituta, interpretada por Jane Fonda.
En 1977 Federico Fellini lo contrató para “Casanova”.
Participó en alrededor de una película por año desde sus inicios en la década de 1970. Casi nunca actuó dos veces bajo las órdenes del mismo director.
“Versátil”
Nacido el 17 de julio de 1935 en Saint John (New Brunswick, este de Canadá), Donald Sutherland tuvo una infancia marcada por graves problemas de salud, pues sufrió de hepatitis, poliomielitis y fiebre reumática.
A los 14 años se convirtió en DJ en una emisora de radio de Nueva Escocia. Formado en teatro e ingeniería por la Universidad de Toronto, se inclinó por el teatro y con 22 años partió hacia la Royal Academy of Dramatic Arts, de Londres.
Fue aclamado como “uno de los actores de cine y televisión más versátiles del siglo” por la revista Variety.
Su esbelta silueta, su aire ausente y sus enigmáticas sonrisas lo dotaron de gran carisma y singularidad.
A mediados de la década de 1960, apareció en series británicas de culto como “El Santo” y “Bowler Hat and Leather Boots”. Luego debutó en el cine con películas de terror italianas como “El castillo de los muertos vivientes” (1964).
Más recientemente, se destacó como el presidente Coriolanus Snow, el cruel dictador de Panem en “Los juegos del hambre”.
Donald Sutherland tuvo cinco hijos, tres de los cuales con la actriz quebequense Francine Racette, su tercera esposa desde 1972.
FUENTE EMOL