Si bien la oposición no creen que el caso de exsubsecretario Monsalve se cuele en el debate del erario, sí piensa que la crisis en la salud o en educación puede complejizar la discusión.
En noviembre la discusión de la Ley de Presupuesto 2025 entrará en tierra derecha, con el inicio del trabajo de la Comisión Especial Mixta que se convoca todos los años para analizar las partidas, que ingresan remitidas desde subcomisiones especializadas.
El Ejecutivo tiene metas claras: espera un incremento en el gasto de 2,7%, para llegar a alrededor de US$93.046 millones. En ese marco, confía en que con la recién aprobada ley de cumplimiento tributario logren ingresar US$1.200 millones, cálculo que ha sido cuestionado por algunos especialistas. Mientras, otros apuntan, en general, a una sobreestimación de las entradas.
Los énfasis del erario están en seguridad, con un alza de más 15%; salud, que sube 4,2%; y vivienda con un aumento de 7,2%.
En las subcomisiones, que ya han sesionado, se han abierto las primeras polémicas. Por ejemplo, la semana pasada los parlamentarios de la Cuarta Subcomisión Mixta dieron el visto bueno a la partida que más crece: la del Ministerio de Cultura. Implica un alza de 45,8%, para llegar a cerca de US$534 millones. La decisión de los parlamentarios generó críticas desde distintos sectores.
Mientras tanto, la Tercera Subcomisión, que sesionó esta semana, rechazó lo presentado por el Ejecutivo para Fonasa, la Subsecretaría de Redes Asistenciales y Servicios de Salud. Asimismo, prohibieron al Estado gastar en transiciones de género en menores.
Al pasar a la Comisión que revisará todas estas partidas, la discusión podría agudizarse más. Pero no solo por las polémicas que ya han tomado forma, sino que también por los frentes de crisis que afectan al Gobierno: las listas de espera en la salud y las dudas en relación a si los recursos alcanzarán este año, y la crisis en educación, a propósito de la situación de los SLEP, la tardía entrega de últiles, y la tragedia del Internado Nacional Barros Arana (INBA), que dejó a varios alumnos con lesiones graves.
¿Partidas en riesgo?
El senador José García Ruminot (RN) no ve con demasiado optimismo lo que hay hasta ahora. Dice que están frente a una disyuntiva: muchas necesidades, con lo más grave en salud y un proyecto con ingresos sobreestimados. Según explica, hay “gasto que debiera relajarse, conforme lo señaló ayer el Consejo Fiscal Autónomo”.
La entidad presentó ayer su informe semestral en la Comisión Mixta, donde pidió que los ingresos “se traten con prudencia”. “Si esos ingresos no se recaudan, si el ministerio de Hacienda se da cuenta, en el transcurso del año, que esos ingresos no se están recaudando, que entonces reaccione ajustando el gasto. Porque lo que no queremos es que se deje de cumplir la meta de balance estructural”, expresó su presidente, Jorge Rodríguez.
García Ruminot, con eso en cuenta, dice que habrá que “buscar un acuerdo que nos permita despachar el presupuesto con mayor realismo”.
El diputado Miguel Mellado, también de RN y de la Comisión, manifiesta asimismo muchas dudas. En relación a lo que ocurrió en cultura, señala que si bien se aprobó, “será revisado en la sala con votaciones separadas”. Con respecto a Salud, en tanto, explica que “se está complicando por la mala gestión de este año”. Mientras, sobre Interior, sostiene que, a pesar de haber sido visado por la Subcomisión, será debatido porque “hay muchas dudas”.
“La tiene difícil de el Gobierno en este presupuesto, porque está muy difícil creerle sus cifras de ingresos y vemos excesivas sus cifras de gastos. No cumple con sus propias metas de balance estructural y le da zarpazos al FEES siendo que tiene US$16.000 millones para endeudarse . Este año ha tenido un muy mal manejo”, sostiene.
Desde el Partido Republicano, por su parte, el diputado Agustín Romero descarta que casos como el del exsubsecretario Monsalve o el del INBA “contaminen” el estudio del presupuesto.
“Lo que sí -dice- es que hay partidas críticas. El tema de Salud, particularmente infraestructura; y Fonasa, en cuanto al financiamiento de las listas de espera, es un tema sensible, delicado. En educación también va a ser un tema delicado la implementación de los SLEP”.
Romero, en todo caso, pone un énfasis: “Lo que está cobrando mucha fuerza es el tema del endeudamiento y particularmente la recomendaciones que está haciendo el CFA para limitar el uso del FEES. Y también lo que se está haciendo con el endeudamiento”.
Cabe destacar que en su exposición de ayer el CFA solicitó al Ejecutivo no autorizar el uso del FEES en el Presupuesto 2025, argumentando que “no es conveniente que se autorice para años en que no hay crisis”. Este mecanismo constituye lo que algunos economistas han denominado un “colchon” para eventualidades.
Desde el PC, en tanto, el diputado Boris Barrera advierte que si la oposición quiere obstaculizar el Presupuesto lo hará con cualquier excusa.
Dice, en todo caso, que hay partidas complejas. “Para solucionar el problema de las listas de espera o para mejorar la infraestructura en los colegios, se necesitan muchos más recursos, por lo tanto no creo que estén en peligro de que se rechacen”, explica.
“Sin duda -sostiene- la oposición va a tratar de hacer sus puntos, pero no creo que lleguen al extremo de rechazar algo. Sí, es complejo el Presupuesto en Salud, sobre todo por las listas de espera y otras demandas que han levantado desde los trabajadores y los usuarios (…) y en Educación también, siempre ha sido un ministerio complejo”.
“Un escenario difícil”
Rodrigo Pérez de Arce, investigador de Faro UDD, sostiene que “que es evidente que las condiciones bajo las que se está dando la discusión del presupuesto van a influir en su tramitación”.
Junto con ello, agrega que “esto se dará particularmente en partidas que sean sensibles, o que tengan alguna relación con las fuentes de conflicto, como seguridad, educación o salud, porque también son herramientas con las que cuenta la oposición para influir en el gasto del gobierno”.
“En este sentido -concluye- la tramitación de la ley de presupuesto será parecida a la de otras leyes, lo cual augura un escenario difícil para un gobierno que es minoría y que tiene que pirquinear votos para sacar sus proyectos adelante”.
Fuente: Emol