El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal (TOP) de Copiapó condenó a H.E.O.R. a la pena efectiva de 12 años y 184 días de presidio por su participación, en calidad de autor, en el delito frustrado de femicidio.
Dicho ilícito fue perpetrado en marzo del año pasado en la comuna de Caldera.
El tribunal estuvo compuesto por los magistrados Franco Madrid, en calidad de Presidente, Nathalie Fuentes y Adrián Reyes como redactor, quienes entregaron un fallo unánime.
Además, el condenado quedó con prohibición de acercarse a la víctima, su domicilio, lugar de estudio, trabajo o cualquier otro donde se encuentre o visite regularmente, por el término de dos años tras cumplir con la pena privativa de libertad.
Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
El tribunal dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que los hechos ocurrieron el pasado 22 de marzo de 2022, en el domicilio que compartían ambas personas en Caldera, cuando el acusado sostuvo una discusión con la víctima atacándole con un cuchillo, provocándole varias heridas cortopunzantes en su cuerpo
Posteriormente, funcionarios municipales intervinieron y retuvieron al acusado. Personal policial concurrió al lugar y procedió a la detención de H.E.O.R.
La víctima fue acompañada durante todo el proceso por el Servicio nacional de la Mujer y la Equidad de Género (SernamEG) Atacama, específicamente por la Línea de Violencia Extrema y la abogada Camila Morales, quien presentó la querella correspondiente.
Respecto a los acompañamientos realizados a la víctima y en atención a la gravedad de los hechos, la Directora Regional, Camila Tapia, mencionó “Cuando ocurrieron los hechos la víctima se resguardo en una de las casas de acogida de SernamEG, donde entregamos apoyo a ella y sus hijos e hijas. Es importante relevar que como instituciones públicas tenemos el deber de atender a las mujeres víctimas de violencia grave, sin importar su origen, condición o situaciones en las cuales se pudieron ver involucradas antes del delito que fueran víctimas. Este caso en particular, nos dejó muchas enseñanzas, hay mujeres con distintas historias de vida, distintas realidades, orígenes y con miedos que son parte su trayectoria. Por eso, es deber de cada institución el actuar con perspectiva de género, sin olvidar que nos encontramos ante una mujer que pudo haber muerto a manos de su agresor”
“Hoy valoramos que el tribunal, haya visibilizado todos las aristas de este caso, y la complejidad del mismo, ya que el agresor y condenado por el delito de femicidio frustrado es un peligro no solo para la víctima, si no que para toda la sociedad. Este caso tan lamentable, nos dio la posibilidad de poder actuar, en pro de proteger a la víctima y lograr entregar justicia por los hechos que vivió”, agregó la Directora Regional de SernamEG Camila Tapia.