La Directora Regional del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural (Serpat), Catisis Lobos, se refirió a los rayados que afectaron a la catedral de Copiapó.
Específicamente, se trata de la aparición del grafiti de un dinosaurio en la fachada de la histórica edificación, catalogada como un Monumento Nacional, por lo que cuenta con una legislación que resguarda su integridad.
Sumado a eso, esta situación ha generado opiniones divididas en los habitantes de la capital regional.
En concreto, la autoridad regional indicó que lamentan la aparición de estos rayados en la Catedral de Copiapó, junto con los daños que presentan otros hitos patrimoniales de la comuna, tales como las estatuas de la Plaza de Armas. Deterioro que, en su mayoría, es producto de la intervención humana.
Ante esta situación, desde el servicio comentaron que se encuentran trabajando en el resguardo y puesta en valor del patrimonio cultural de Atacama. Medidas las que esperan aumentar el respeto y cuidado de estos espacios.
De momento, no se refieren a la posibilidad de presentar una querella en contra del autor de este grafiti, tomando en cuenta que se trata de una persona plenamente identificada, ya que, a través de redes sociales, ha reconocido la autoría en este y otros rayados similares que han aparecido en la capital regional.
De acuerdo a lo establecido en el artículo 38 de la Ley 17.288, los daños a Monumentos Nacionales son catalogados como un delito y las sanciones establecidas son una pena de presidio menor en sus grados medio a máximo y una multa de cincuenta a doscientas unidades tributarias mensuales (UTM).