A inicios de este año, la detección de dos ejemplares de la temida Ceratitis capitata, conocida como la mosca de la fruta, activó una campaña de control en Copiapó por parte del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).
Dicho hallazgo generó gran preocupación, ya que Chile es el único país en América considerado libre de esta plaga, que es una de las más dañinas para la agricultura mundial.
Esto porque la mosca de la fruta afecta a más de 250 especies de frutas y hortalizas, dejando larvas que destruyen los frutos al alimentarse de su pulpa.
El descubrimiento tuvo lugar en el sector de Paipote, lo que motivó que los esfuerzos preventivos se focalizaran en esa zona.
José Herrera, Jefe de Campaña de SAG Atacama, explicó en una entrevista con Nostálgica que, en febrero, el equipo del SAG estableció un centro de operaciones en el Centro Comunitario de Paipote para coordinar de mejor manera las labores en terreno.
La campaña de erradicación incluye diversas acciones, como la instalación de trampas, la implementación de una zona de cuarentena, y un intenso trabajo de muestreo en los hogares cercanos al hallazgo, con el fin de recolectar muestras de los árboles frutales.
Sin embargo, este trabajo no ha estado exento de dificultades, ya que algunos residentes han mostrado reticencia a entregar información o permitir el acceso del personal del SAG a sus viviendas.
Ante esto, el equipo del SAG ha destacado la importancia de sensibilizar a la comunidad sobre los riesgos que esta plaga representa para la agricultura local.
Afortunadamente, Herrera indicó que hasta el momento no se han encontrado nuevos ejemplares de la mosca de la fruta.
No obstante, el trabajo del SAG no ha concluido y la campaña continuará en las próximas jornadas para garantizar que no haya más focos de la plaga en la región.