Si usará o no corbata, cuántas personas podrán estar presentes, si se permitirá que la ciudadanía siga el acto desde el entorno y hasta cómo se musicalizará, es parte de lo que se está coordinando.
Son 65 días los que faltan para que el Presidente electo Gabriel Boric asuma en el cargo y desde ya se trabaja en el Senado para la ceremonia de asunción. En ese sentido, hoy llegó hasta Valparaíso el coordinador de cambio de mando del Mandatario electo, Roberto Estay y el director adjunto de ceremonial y protocolo de Cancillería José Jaliliye, para reunirse con la presidenta del Senado, Ximena Rincón (DC) y todos los funcionarios a cargo del acto.
Especial énfasis en el interés de Boric de mantener las tradiciones republicanas fue el que hizo Estay, mientras que entre todos acordaron tras esta primera reunión, que las decisiones se tomarán en base a la situación sanitaria en la que se encuentre Valparaíso el próximo 11 de marzo.
El coordinador enviado por el Presidente electo, quien estuvo acompañado por el productor del comando, recorrieron todas las instalaciones y jardines del Senado, incluido el Hemiciclo el que podría ser considerado como un espacio satélite para la transmisión de la ceremonia en caso de que no todos los parlamentarios puedan entrar al Salón de Honor si así lo establece el aforo sanitario.
Mientras que en el Salón de Honor a Estay, se le explicó con fotos de actos antiguos y mapas con los que cuenta el jefe de Ceremonial y Protocolo del Senado, Guillermo Miranda, cómo funciona la ceremonia y dónde se sientan autoridades entrantes y salientes, invitados extranjeros, familiares, prensa y hasta el coro, que esta vez podría estar ausente y contar con música envasada si la situación sanitaria no lo permite.
“Hemos recibido la mejor disposición a que tengamos una coordinación armoniosa que logre consensuar lo importante de estas tradiciones republicanas que implican el traspaso de mando con algo que para nuestro Presidente (electo) es fundamental, que es la seguridad en el contexto infectológico que vivimos. Eso va a requerir mucha flexibilidad de parte de los actores, va haber algunos cambios en relación a otras ceremonias por los temas de aforo, pero puedo decir que está la mejor de las voluntades de todos los actores, tanto de la Cancillería, del Congreso para que esto fluya y de nosotros también”, explicó el representante de Boric.
Estay aseguró que “el Presidente (electo) se va a atener a las tradiciones de Estado y a la importancia de este hito republicano de la Nación y los cambios van a estar sujetos a la realidad infectológica de la región”, agregando que será el Ministerio de Salud el que defina finalmente cuántas personas podrán estar en la ceremonia en el Salón que puede recibir más de 300 personas en un contexto sin pandemia.
En ese sentido, el secretario General del Senado, Raúl Guzmán, sostuvo que “vamos a tener distintos planes dadas las condiciones sanitarias que se fijen en el tiempo y la idea es prever en lo posible todas las situaciones para desarrollar esta actividad”.
Invitaciones, ubicaciones y la corbata
También recalcando las tradiciones y el carácter republicano de la ceremonia, el representante de la Cancillería, Jaliliye, explicó que aún no se han enviado las invitaciones a Mandatarios o representantes extranjeros. “Eso se conversa entre el equipo del Presidente electo y el saliente, pero por el momento estamos formando los equipos y poniéndonos de acuerdo en el formato de la ceremonia”, declaró.
El jefe de protocolo del Senado, Miranda, también en relación a las autoridades extranjeras que se podrían invitar, al ser abordado por la prensa explicó que “una de los temas que se le hizo presidente al equipo del Presidente electo es que fuese uno solo, no una persona más dos o más tres (como esposa o esposo y canciller)”. Además se recordó que “ellos ya vienen con sus respectivos documento sanitarios ya demás en el aeropuerto internacional también tenemos un control y el resto de los invitados, estamos trabajando para que las invitaciones digan que tienen que presentar su pase de movilidad”.
Por otro lado y considerando el interés ciudadano que genera el Presidente electo, Mirandas detalló que “dependiendo de cómo estemos con el aforo vamos a volver con las galerías que se colocaban en frente de calle Pedro Montt y colocando algunas pantallas gigantes para que el público pueda presenciar lo que está pasando dentro. Ahora si nos mantenemos en la fase que estamos, este cambio de mando va a ser muy parecido a las cuentas públicas que tuvimos el año pasado. Pero esa va a ser una materia que la va a ver el equipo de trabajo del Presidente electo con las autoridades de salud en ejercicio, para ver algunas excepciones que se pudieran dar dado el alto interés que hay por este Presidente electo”.
Al ser consultado sobre si se conversó si el frenteamplista usará o no corbata, Miranda contó que “lo ideal sería que sí, y ha sido una de las recomendaciones que más le indiqué a don Roberto Estay, para que por lo menos la use mientras se le impone la banda presidencial. Pero yo creo que el Presidente electo está muy llano a cumplir con lo establecido dentro de las normas protocolares además que todo el mundo nos va a estar mirando”.
En tanto, en el caso de que Irina Karamanos se estableció que será el Presidente electo el que defina dónde se sentará porque “si ella acepta el cargo de Primera Dama le corresponde sentarse abajo (frente a la testera y no en el palco con el resto de los familiares), aún cuando sea la polola”.
Según lo que se estima hasta ahora y dado a que la comuna bajó a Fase 3, el aforo considerado es de 50 personas y si se avanza en el Plan Paso a Paso se podría llegar hasta permitir a 300 personas presentes en el Salón de Honor.
Fuente: Emol.com