El 10% que la Empresa Nacional de Minería (Enami) posee en la propiedad de Quebrada Blanca, valorizado en unos US$ 1.500 millones, sería de interés para el controlador del yacimiento, la canadiense Teck Resources, en un potencial escenario de venta. Así lo afirmó ayer el CEO de la compañía, Don Lindsay al ser consultado tras participar en la Cesco Week.
“Si ellos (Enami) estuvieran interesados en vender, ciertamente estaríamos interesados en comprar”, señaló el ejecutivo, añadiendo, sin embargo, que a la fecha la asociación es “estable”, dado el conocimiento que la estatal posee frente a la calidad de la operación, en la que Teck cuenta con el 60% de la propiedad, mientras que Sumitomo ostenta el 30% restante.
En la ocasión, Lindsay también se refirió a los avances que registra a la fecha el proyecto de unos US$5 mil millones Quebrada Blanca Fase 2 (QB2) que lidera la canadiense. Según el ejecutivo, éste va en línea con los planes originales, por lo que el inicio de la producción partiría a fines de la segunda mitad de 2021.
“Estamos muy emocionados con el proyecto, emocionados por poder invertir en Chile, que creemos que es de los mejores países del mundo para invertir desde la perspectiva de la industria minera (…) Hemos tenido una buena cooperación en todos los niveles de gobierno y por supuesto existe una fuerza laboral con muchas habilidades”, comentó.
“Tenemos confianza en el gobierno, en el régimen de acá. Si uno ve en el mundo existen muchos países que podrían aprender de Chile y la importancia de la predictibilidad”, añadió.
QB3
Ante la posibilidad de desarrollar QB3 una vez terminada Quebrada Blanca Fase 2, Lindsay reconoció que QB2 no recoge todas las potencialidades del yacimiento, ya que utilizará sólo un cuarto de los recursos que existen en el lugar.
“QB2 no es del tamaño óptimo de desarrollo. Comenzamos oficialmente estudios de alcance para QB3 y creemos que existe potencial para duplicar QB2 y tomar la operación a más de 400 mil toneladas diarias de producción. Esto haría que combinadas QB2 y QB3, fueran una de las principales cinco minas de cobre del mundo”, aseguró.
En esa línea, explicó que en términos de financiamiento la estructura de asociación que se tiene con Sumitomo Metal Mining y Sumitomo Corporation permite una mayor inversión y anticipó que serán estas firmas las socias de Teck “a lo largo de todos los proyectos”.
Asimismo, señaló que el desarrollo de QB3 será más eficiente y requerirá de menor inversión, toda vez que infraestructuras como caminos, campamentos, y el puerto, ya estarán construidos.
De igual modo, comentó que con Collahuasi podrían existir sinergías en el futuro, una vez que las operaciones se sigan expandiendo.
“Hemos tenido conversaciones preliminares a nivel de CEO, pero es algo que tiene que desarrollarse con el tiempo”, dijo, precisando que sus dichos son sólo en el marco de posibilidades conceptuales.
Fuente: mch.cl
