Ante el aumento sostenido de le hechos violentos al interior de los establecimientos educacionales y sus inmediaciones, desde el Comité Directivo Local del Servicio Local de Educación Pública (SLEP) de Atacama, entregaron una serie de recomendaciones, entre las que destaca la paralización de las jornadas educativas.
Con esta detención, el Comité Directivo planea generar instancias para la reflexión y escucha, con el fin de generar un análisis que permita diagnosticar el problema de fondo. Además, recomiendan trabajar en la prevención y orientación, buscando mejorar la convivencia escolar, promoviendo la resolución pasiva de conflictos. Algo que también es sugerido por la Superintendencia de la Educación.
Junto a eso, desde el comité destacaron la importancia de trabajar en el Plan de Gestión Escolar de la Convivencia Escolar, con acciones acentuadas a la realidad social y en conjunto al Ministerio de Educación. Otro punto importante es la entrega de herramientas y fortalecimiento de apoyos psicosociales, esto para que el personal educativo pueda brindar los apoyos necesarios para los estudiantes.
La Presidenta del Comité, Paula Aceituno, destacó la importancia de que se genere un sentido de pertenencia en los establecimientos educacionales, los cuales deben ser considerados como su segundo hogar. Para eso, proponen la utilización de sus instalaciones para realizar actividades que promuevan el arte, la cultura, el deporte o la ciencia.
Manteniendo la línea, Aceituno indicó que es fundamental que las comunidades educativas actualicen los “Protocolos de Seguridad y el Reglamento Interno de los establecimientos educacionales”, dándole prioridad al estudiantado, buscando resguardar su integridad, seguridad y protección.
Trabajo que debe ser realizado en conjunto a los Centros de Padres y el Consejo Escolar. Actualización que debe tomar en cuenta lo escrito en la Ley N° 21.127, más conocida como “Ley de Aula Segura”, donde se sancionan las agresiones de carácter sexual; acciones que produzcan lesiones; el uso, porte, posesión y tenencia de armas o artefactos incendiarios y los actos que atenten en contra de la infraestructura esencial de los establecimientos educativos.
La misma ley contempla la expulsión y cancelación de matrículas cuando se incumplan algunas de las normas descritas en el reglamento o cuando afecte enormemente la convivencia escolar, ya que la idea es prevalecer un espacio seguro para todas y todos.
Pese a todos estos esfuerzos, desde el Comité Directivo indicaron que el trabajo fundamental debe realizarse en los hogares de los estudiantes, debido a que son los padres, madres y apoderados los que entregan una enseñanza, la que debería estar orientada en la generación de principio y valores, con un trato respetuoso, cariñoso y dialogante.
Recomendaciones que llegan después de una ajetreada jornada, cuando varios alumnos, principalmente del Liceo José Antonio Carvajal, protagonizaron una serie de incidentes en las calles y establecimientos educacionales de Copiapó
