Este miércoles el Gobierno lanzará la tercera y última iniciativa de intervención sobre la Macrozona Sur, con el fin de consensuar una reforma a la ley indígena y un nuevo trato entre el Estado y el pueblo mapuche.
Con una ceremonia en la sede de Gobierno, el Presidente Gabriel Boric encabezará este miércoles la instalación de la Comisión de la Paz y el Entendimiento, una instancia que buscar definir una política de restitución de tierras para el pueblo mapuche y que radica en la última de las tres estrategias -sumado al plan Más Seguridad y Buen Vivir- que ha diseñado el Ejecutivo para intervenir de manera integral a la Macrozona Sur.
En la Moneda agendaron el lanzamiento de la comisión para este 21 de junio de modo que coincidiera con el día Nacional de los Pueblos Originarios. El acto se ha pensado como un hito republicano que concilie una voluntad transversal por reformar la actual ley indígena.
De tal manera, en el Ejecutivo han convocado a representantes de los partidos oficialistas y de oposición, con la idea de suscribir un compromiso institucional de sacar adelante el trabajo de la comisión. En ello se habría extendido una invitación a entidades privadas y a gremios de las empresas forestales.
Según sostuvo el Mandatario en noviembre del 2022, “la Comisión por la Paz y el Entendimiento tendrá una agenda abierta, donde todos podrán plantear sus puntos de vista, pero con un mandato muy específico: determinar con claridad la demanda de tierras de las comunidades mapuche, y proponerle al país mecanismos concretos, con plazos concretos para saldar y reparar esta deuda que el Estado de Chile tiene con el pueblo mapuche en un plazo que acordemos entre las partes y que seguramente excederá a este Gobierno”.
De tal manera, el Gobierno ha planteado un diseño de funcionamiento, que contempla objetivos, estructura y plazos, pero que exceptúa los bordes de la discusión de los propios comisionados. A continuación las cinco claves para entender la nueva Comisión de la Paz y el Entendimiento.
Objetivos
De las características de la comisión ya había adelantado una parte la ministra del Interior, Carolina Tohá, al Congreso Nacional, el pasado 9 de mayo, cuando detalló el balance anual del estado de excepción.
Allí se planteó como objetivo general de la comisión el “liderar un proceso de diálogo y construcción de acuerdos para abordar institucionalmente el conflicto y otorgar soluciones de Estado al problema de las tierras”.
Asimismo, se exhibieron tres objetivos específicos: el censo de tierras protegidas bajo títulos de merced entregadas o pendientes a ser entregadas; el censo de tierras demandadas no consideradas en los títulos de merced y el fortalecimiento de Conadi para cumplir con el objetivo de la comisión.
Con todo, la comisión deberá emanar una propuesta de nueva política de reparación, que contemple una reforma a la ley indígena, además de un nuevo trato entre el Estado y las comunidades mapuche.
Estructura
Para dar cumplimiento a estos objetivos, la instancia será encabezada por una comisión con cinco a siete integrantes, los que serán acompañados por un consejo experto con siete a nueve miembros.
Representando al Gobierno, estará la secretaria ejecutiva de la comisión, que estará en manos del psicólogo y militante de Convergencia Social, Víctor Ramos, quien además asume como encargado del Plan Buen Vivir. Esta partición tiene a su cargo la administración y las comunicaciones; la atención al público; el archivo y registro, además de la documentación, investigación y catastro.
Integrantes
Sobre el perfil de los comisionados, desde el Gobierno señalaron que deberán corresponder a liderazgos políticos con trayectoria nacional y local. También bregaron porque haya paridad en integrantes mapuche y no-mapuche, además de equilibrio de género y equivalencia entre el oficialismo y la oposición.
Según consignó El Mercurio, dos nombres se dan por sentado para integrar la comisión: el exministro Alfredo Moreno y el senador Francisco Huenchumilla. Asimismo, se menciona a la senadora Carmen Gloria Aravena; la diputada Emilia Nuyado; la exconvencional Angélica Tepper; el dirigente de los agricultores, Sebastián Naveillán y el escritor Pedro Cayuqueo.
Contornos
El principal desafío que asumirán los comisionados será despejar si en la restitución de tierras se contemplarán sólo los títulos de merced o también las “tierras ancestrales”, de las que ha hecho referencia en el pasado el propio Presidente Boric.
Desde el Ejecutivo han delegado la resolución de este tema a la comisión y así lo reafirmó este lunes la ministra Jeannette Jara, en calidad de vocera subrogante. “La comisión tiene por objetivo poder dar los contornos para lo que es la aplicación en el futuro de los programas que tienen que ver con la restitución de tierras sobre las actorías que van a ser convocadas, y sin duda, que tiene que ser lo más amplia posible”, sostuvo, apuntando que será la misma comisión la que definirá qué es lo que se entiende por tierras ancestrales.
Plazos
El simbolismo con el que el Ejecutivo definió la fecha de instalación de la Comisión para la Paz y el Entendimiento también se extrapola a la fecha de su cierre. La instancia tendrá un plazo de funcionamiento de dos años, y concluirá con la conmemoración de los 200 años del Tratado de Tapihue.
Con todo, la expectativa sobre la comisión es que exista ánimo de negociación para viabilizar consensos políticos entre las partes.
“La idea es llegar a un resultado en que todos cedan un poco, pero al final sea también un ganar/ganar. Esto implicará muchas sabiduría y sentido de realidad. Finalmente, lo que se persigue con esta y otras iniciativas, es que la Araucanía y sus habitantes vivan en paz”, sostuvo la senadora Carmen Gloria Aravena (P. Republicano).
A su vez, el senador Francisco Huenchumilla (DC) relevó que “se va a requerir la voluntad política de todos los sectores políticos, los dirigentes de la zona sur, los dirigentes de los agricultores, las forestales y los dirigentes del mundo político”.
En ese sentido, el exintendente de La Araucanía, enfatizó que “aquí se va a requerir sobre todo la disposición a entenderse, a hacer concesiones mutuas y a entender que esta no es una Comisión como las que hubo en el pasado, que fundamentalmente fueron comisiones que hicieron proposiciones y diagnósticos. Aquí se trata de la posibilidad de hacer una gran negociación al más alto nivel para encarar este difícil y complejo problema”.
Fuente: Emol