El sujeto identificado con las iniciales de R.A.A.B cometió abusos entre los años 2012 y 2015 a distintos menores de edad que eran estudiantes del colegio donde ejercía como pedagogo.
El Tribunal Oral en lo Penal (TOP) de Arica condenó durante este miércoles a un profesor a la pena de 12 años de presidio efectivo por cometer tres actos de abuso sexual contra niños de enseñanza básica en un establecimiento educacional de la ciudad de Arica.
De acuerdo a lo establecido durante la investigación, el sujeto identificado con las iniciales R.A.A.B, cometió estos abusos entre los años 2012 y 2015 a distintos menores de edad que eran estudiantes del colegio donde ejercía como pedagogo.
Una de las víctimas de este abusador tenía seis años, a quien realizó distintos actos de “relevancia y connotación sexual en la sala de clases”.
En otro caso, abusó de un menor de 8 años, a quien sentó en sus piernas, mientras le mordía la oreja y besó en la boca.
El tercer caso de abuso sexual R.A.A.B lo cometió contra otro niño de ocho años, a quien llevaba hasta un inmueble con la excusa de realizar un reforzamiento de los contenidos escolares, donde realizó tocaciones en el cuerpo de la víctima.
Debido a esto, el tribunal, de forma unánime aplicó la pena de 12 años de cárcel efectiva para el docente por los delitos consumados de abuso sexual a menores de 14 años. Además, se le aplicaron penas accesorias, como la inhabilitación perpetua para ejercer como profesor o cualquier cargo que lo acerque a menores de edad y “la interdicción del derecho de ejercer la guarda y ser oído como pariente en los casos que la ley designa”. También será sujeto de vigilancia por 10 años luego de cumplir la condena principal.
“Asimismo, se decreta como medida de protección de las víctimas y su familia, en los términos del artículo 372 TER del Código Penal, la prohibición del sentenciado de visitar el domicilio, el lugar de trabajo o el establecimiento educacional de las víctimas, así como la prohibición de aproximarse a dichas personas; lo anterior por igual tiempo que la pena privativa de libertad que se le impone en la presente sentencia”, sostiene el fallo del TOP.
Luego de cumplir la sentencia, a este profesor se le tomarán muestras de ADN para incluirlo en al registro de condenados y tener su huella genética.
Fuente: La Tercera
