“El año con la mayor destrucción y pérdidas desde que se tiene registro”. Ese es el negativo balance final de 2021 que hacen desde la Asociación de Contratistas Forestales (Acoforag), respecto de la grave situación de violencia en la Macrozona Sur.
Según consignó el Austral de Temuco, y en base a información entregada por el gremio, en 2021 se registraron 89 ataques incendiarios en contra de 90 empresas prestadoras de servicios a forestales, los que causaron pérdidas avaluadas en $41.422 millones (casi US$50 millones).
De acuerdo con los datos, en los ataques incendiarios fueron afectadas 90 empresas contratistas o prestadores de servicios independientes, los cuales sufrieron las pérdidas de 338 equipos forestales, entre camiones (31%) y máquinas especializadas (69%).
Los cálculos de Acoforag dan cuenta que el 57% del total de atentados contra espacios de explotación forestal se produjeron en La Araucanía, seguida por Biobío (33%), Los Ríos (7%) y Los Lagos (4%).
Las comunas de mayor recurrencia de ataques incendiarios el año recién pasado fueron Carahue y Lumaco, con diez atentados cada una. Le siguieron Cañete (6), Collipulli (5) y Contulmo (5).
Con todo, 2021 dejó como promedio 7,5 ataques incendiarios al mes a empresarios y contratistas de la zona. Asimismo, el año pasado concentró el 27% del total de atentados desde que se tienen registros.
“El año 2021 ha sido el más violento desde 2014, donde partimos con las estadísticas sobre los hechos que afectan a nuestro rubro. A la luz de esos datos, entendemos que el Gobierno, las policías, el Ministerio Público y el Poder Judicial, no han hecho su trabajo de garantizar el derecho a trabajar en seguridad”, comentó René Muñoz, gerente de Acoforag.
Desde el gremio llamaron al Gobierno entrante de Gabriel Boric, que asumirá en marzo, a “no abandonar” al sector forestal.