Finalmente se pudo concretar la esperada reunión entre docentes y el ministro de Educación para poder analizar la situación que se vive en las comunas donde el SLEP Atacama es sostenedor de los colegios.
La cita que duró cerca de 8 horas y terminó cerca de las 3 de la madrugada de este jueves, se realizó en la Delegación Presidencial, lugar donde estuvieron presentes dirigentes del Colegio de Profesoras y Profesores, autoridades regionales y el jefe de la cartera.
Nicolás Cataldo, sostuvo que estaban al atento de toda la situación vivida en Atacama y su llegada es con el fin de buscar diálogo y acuerdos. Eso sí, las soluciones no vendrán de un día para otro, ya que algunas demandas son a largo plazo.
Primer e importante paso que dio el gremio docente en la búsqueda de soluciones a las demandas que han levantado hace años, y que en marzo pasado se firmó un documento para ir solucionándolas. Mismo compromiso que indican, ha tenido un cumplimiento que no llega más allá del 25%, de ahí la molestia.
Por lo pronto, Carlos Rodríguez, presidente regional del Colegio de Profesoras y Profesores indicó que analizados los tres documentos que sustentan su movilización se llevará a cabo una auditoría forense que muestre de manera más detallada las irregularidades de la educación pública en las comunas movilizadas.
Según explica el ministro Cataldo, el plazo que se dieron ambas partes será la última semana de septiembre para analizar los nuevos antecedentes que se tengan hasta esa fecha.
Proceso que se realizará en cada comunidad estudiantil. Carlos Rodríguez se refiere a una radiografía que realizarán y que tendrá la participación de los docentes, asistentes de la educación, padres, madres y apoderados.
Mientras, indica, las clases seguirán suspendidas hasta levantar estas demandas, explicando que, esta es una oportunidad única para poder presentarlas al nivel central y hay que hacerlo bien
Al parecer, las confianzas comienzan a recuperarse tras la reunión que esperaban los profesores y profesoras. Ahora viene un proceso de recopilación de datos con las comunidades estudiantiles para levantar un informe final el que deberá ser firmado por las autoridades las próximas semanas, mientras los estudiantes de los colegios públicos de Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla y Chañaral seguirán con sus clases suspendidas.