A pocos días de ganar la elección presidencial en Colombia, Gustavo Petro tuvo su primer cruce con la Fiscalía General de su país, luego de que en su discurso de la victoria el domingo pidiera la puesta en libertad de aquellos jóvenes detenidos durante el estallido social registrado en el país caribeño el año pasado.
El domingo, y ante sus seguidores, el Presidente electo mencionó a los “jóvenes encadenados, esposados, tratados como bandoleros, simplemente porque tenían esperanza y amor“, en referencia a los detenidos de la llamada Primera Línea, un grupo creado para enfrentar a la Policía en las protestas callejeras y que las autoridades consideran tienen vínculos con grupos guerrilleros.
Es por eso que, afirmó Petro, “le solicito al fiscal general de la Nación que libere a nuestra juventud. Liberen a los jóvenes”.
Los dichos del líder izquierdista le valieron las primeras críticas tras su triunfo electoral, pues ese mensaje fue interpretado como un deseo de interferir en la justicia y atacar la separación de poderes.
En esa línea, la respuesta del fiscal general de Colombia, Francisco Barbosa, fue clara: “Si el Presidente electo quiere buscar la liberación de jóvenes que cometieron delitos, debe pedirle el favor al Congreso que cambie la ley y no al fiscal general”, dijo al diario El Tiempo.
Así, el persecutor -que en su momento sonó como posible ministro de Justicia del gobierno de Iván Duque- invitó a Petro “a que tramite sus debates institucionalmente y no de manera personal, teniendo en cuenta la colaboración armónica de los poderes públicos”.
“La ley en Colombia se cumple conforme a los artículos 6 y 29 de nuestra carta política”, enfatizó.
El año pasado, Colombia vivió intensas protestas desde el 28 de abril contra el proyecto de reforma tributaria impulsado por el Presidente Iván Duque. Las manifestaciones recrudecieron pese a que el Gobierno decidió retirar la iniciativa.
En el marco de las movilizaciones se reportaron más de 1.000 detenidos, de los cuales unos 300 continúan en prisión. La Defensoría del Pueblo, en tanto, confirmó el fallecimiento de 42 civiles y 2 policías. Estos acontecimientos también pusieron en tela de juicio el accionar policial, de hecho, una de las promesas de campaña de Gustavo Petro es reformar la policía.
Fuente: Emol.com