“Uno tiene que ser realista. Este es el nivel que tenía, a mí me gusta ser leal a mi entrenamiento y sensaciones. Si hubiese sido por mí, no hubiese venido”. Esas fueron las palabras de Bárbara Riveros tras finalizar quinta en el triatlón femenino, prueba en la que era la máxima favorita a quedarse con el oro.
Un rendimiento decepcionante de la ganadora de la prueba en Toronto 2015, al igual que la explicación que dio, dando a entender que su verdadera prioridad son los Juegos Olímpicos, a los que todavía no clasifica.
Declaraciones que además hicieron ruido en la delegación nacional. Si bien el COCh evitó referirse al tono de sus dichos, deportistas del Team Chile sí se refirieron a la situación.
Uno que salió en su defensa fue Gaspar Riveros, hermano y compañero de equipo en Lima, quien afirmó que “ya lleva tres juegos olímpicos, el cuerpo ya no es el mismo. Se tiene que cuidar mucho más. Chile tiene que estar agradecido por todo lo que ha dado y no exigirle. Hay Bárbara para más años más, hay que seguir entrenando”.
Sin embargo, hay otros que no comparten esa visión. “Me parecieron un poco desafortunadas sus declaraciones. Este es un torneo importante, no creo que haya querido faltarle el respeto, pero quizás debió medirse un poco más”, confiesa un integrante del Team Chile.
En tanto, otra deportista se sumó al debate y agregó que “ella no debió haber venido, porque venía arrastrando lesiones. Tengo entendido que tuvo que venir por compromisos con el Comité y la Federación. La complica para los Juegos”.
Lo cierto es que el análisis de Riveros, una vez que cruzó la meta del circuito en playa Agua Dulce, también lo hizo considerando en su necesidad de tener que sumar puntos para Tokio 2020, el gran “sueño” que tiene la atleta cuando ya entra en el ocaso de su carrera profesional.
Riveros tiene 31 años y la competición asiática aparece como la gran oportunidad de “Chica” para lograr su gran anhelo: Conquistar su primer metal olímpico…
FUENTE EMOL