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El extraño caso de Perú: Años de crecimiento económico galopante desacoplados de una inestabilidad política crónica

Perú padece una inestabilidad política crónica, marcada por el arribo de seis presidentes en el último lustro, profundas desigualdades sociales, denuncias de corrupción contra gobernantes y la disputa entre poderes públicos. Pero esta semana, la crisis que vive la nación vecina llegó a su punto de quiebre.

Esto, luego de que el ahora ex Presidente Pedro Castillo perpetrara un autogolpe de Estado, al tomar la decisión de disolver inconstitucionalmente al Congreso, motivo por el cual dicho poder se reunió de emergencia y lo destituyó del cargo por incapacidad moral.

Con todo, la economía de Perú acumula casi treinta años en una senda de crecimiento sostenido, solo interrumpido ocasionalmente, que ha llevado a muchos analistas a mirar con detención la resiliencia de la economía peruana.

Las cifras así lo demuestran. De acuerdo al Banco Mundial, el Producto Interno Bruto (PIB) se ha multiplicado por más de seis veces su valor desde 1993 y si en 2001 un 20,3% de los peruanos vivía con menos de US$2,15 al día, en 2022 ese dato se había reducido al 5,8%.

¿Cómo ha logrado la economía peruana progresar en medio de la tormenta política que la afecta? Uno de los pilares centrales detrás de este fenómeno, según el consenso de expertos, es la independencia del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) y su solvente manejo de la política monetaria, claves para mantener el equilibrio en el sistema financiero.

Sobre este punto, la académica del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile, Paz Milet, destacó que “el Presidente del Banco Central se mantuvo en su cargo durante una década, dando ciertas continuidades hacia el inversionista extranjero. Y es un tema muy importante, porque el rol en la estabilidad en materia macroeconómica la están dando otros actores y no el Gobierno”.

En conversación con EmolTV, Milet mencionó que “es un factor bastante interesante cómo los otros actores, el mundo empresarial, los economistas a través del Ministerio de Economía, y también el Banco Central, dan condiciones de estabilidad que permiten al país seguir funcionando más allá de los vaivenes políticos”.

En esa línea, Carlos Smith, docente investigador del Centro de Estudios en Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo, subrayó que “Perú es una economía que ha estado creciendo sostenidamente hace ya un par de años, y tiene, además, un Banco Central autónomo que ha manejado bastante bien la política monetaria, ha tenido cierta seguridad en términos de responsabilidad fiscal, lo que genera una base bastante sólida desde esa perspectiva, aún cuando tienen este problema político”.

Cabe destacar que el directorio del Banco Central consta de siete miembros que son elegidos por el gobierno de turno y el Congreso, pero una vez designados son totalmente independientes. En este caso puntual, el actual titular de la entidad monetaria, Julio Velarde, fue designado en septiembre de 2006 y ratificado en el cargo por los presidentes Ollanta Humala en 2011; Pedro Pablo Kuczynski en julio de 2016 y Pedro Castillo en septiembre de 2021.

Cuando Castillo lo convalidó en el puesto, los mercados interpretaron la noticia como una señal de confianza en la economía peruana ante las dudas en torno a la política que seguiría el entonces nuevo presidente.

Smith también indicó que “uno puede ver en Perú lo que era Chile un par de décadas atrás, teniendo buena política monetaria, relativamente responsable fiscalmente hablando, pero tienen este problema político que hoy día se ha agudizado, aunque han demostrado que salen de eso, y las reglas se mantienen, cosa que es bastante importante, generar la certeza jurídicas para los inversionistas”.

La mirada de empresarios

Consultado por el desacople del devenir político y económico en Perú, el presidente de la Cámara Chileno Peruana de Comercio, Jaime de Orbegoso, comentó a este medio que “Perú ha demostrado siempre ser capaz de salir las crisis políticas institucionalmente, en respecto del marco constitucional, de las leyes. Los últimos treinta años así fue, en algún momento el Presidente Fujimori renunció, y hubo un proceso de transición, se convocó a elecciones y hubo un orden”.

“Más recientemente se vacó al Presidente Kuczynski, también hubo una transición, se convocó a elecciones, y ahora nuevamente tenemos una situación de vacancia, siempre digamos dentro de un orden constitucional, y las Fuerzas Armadas han siempre respaldado el lado de las leyes, y se ha mantenido la democracia”, añadió.

A este respecto, de Orbegoso sostuvo que si bien Perú presenta dificultades en lo político, su capacidad de resolverlas por la vía institucional “da una señal de que Perú, por más problemas que tenga, es capaz de salir adelante, y enfrentar, y manejar la situación como corresponde”.

Junto con ello, expuso que “Perú tiene hoy en día un marco legal favorable para las inversiones, para el desarrollo económico y la estabilidad, y yo veo que esa es la prioridad desde la mayoría de la población, varios sectores dentro de lo que es la clase política, y el Estado”.

En tanto, Juan Sutil, presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), explicó que “en algunas materias Perú sí tiene estabilidad. En materia tributaria la ha tenido, y en materia como el derecho de propiedad y otras. Esas condiciones permiten que, aparte de la oportunidad económica de desarrollar un país pobre, sea atractivo desde el punto de vista de las rentabilidades a los inversionistas que invierten en minería, en agroindustria, en pesca y en otras áreas que Perú tiene”.

“También hay otro elemento que puede influir en este desacople entre la economía y la política que es la informalidad. Perú tiene prácticamente el 70% de su economía informal, y eso claramente también desacopla el vaivén político del económico”, acotó, afirmando que si bien “la política no es estable y la economía tiende a serlo, ¿por qué? Porque finalmente los políticos tienen menos injerencia en el devenir del destino de los países. Para el destino de Perú el señor Castillo no es relevante, es una realidad”.

Por su parte, Tomás Flores, economista de Libertad y Desarrollo, comentó que “la economía peruana se caracteriza por una alta informalidad y de hecho el 76% de los ocupados lo hacen en esa área de la economía. Esto lleva a que las modificaciones que traten de implementar un Gobierno, como alza de impuestos, tienen bajo impacto, ya que gran parte de la economía no paga impuesto ni contribuye a la seguridad social”.

“Perú tiene cerca de 33 millones de habitantes, lo que es un mercado interesante, con grandes oportunidades de inversión, similares a las observadas en Chile en la década de los noventa”, recalcó.

Fuente: Emol.com

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