Un verdadero escándalo es lo que ha ocurrido con Independiente de Avellaneda desde su aterrizaje en Brasil para disputar el duelo de este martes ante Bahía por la Copa Sudamericana.
Ayer lunes, el plantel argentino estuvo varado seis horas en el aeropuerto de Salvador. No les permitieron ingresar al país debido a que algunos jugadores fueron catalogados como “detectable” de covid.
¿Qué pasó? Un grupo de futbolistas ya se habían contagiado, pero antes de viajar dieron negativo en el PCR, por lo que Conmebol aprobó el traslado. Sin embargo, en Brasil un examen encontró restos del virus.
Tras varias horas, un grueso de la delegación fue autorizada a trasladarse al hotel, pero otras 11 personas, entre ellas futbolistas, no. Ellos tenían que volver hoy a Argentina.
En ese grupo estaban jugadores como Juan Manuel Insaurralde y Pedro Pablo Hernández, quienes en esta jornada se disponían a regresar a Argentina tras pasar la noche en el aeropuerto.
“Vergonzoso”, publicó el ex defensa de Colo Colo en sus redes junto a una imagen de las personas durmiendo en el suelo del recinto aéreo.
Lejos de mejorar, el “escándalo”, como titular al otro lado de la cordillera, creció este martes. ¿Qué pasó? “La policía local amenazó a jugadores del equipo de Falcioni y demoró a Juan Manuel Insaurralde y Adrián Arregui, que estaban para viajar de regreso. ¡Hasta les sacaron los celulares!”, relató Olé.
TyC aportó más detalles: “Los jugadores de Independiente fueron amenazados con un arma, discutieron y ahora se encuentran aislados. El vuelo de regreso está demorado”.
Momentos más tarde y entre tanta polémica, los futbolistas mencionados fueron liberados y se unieron al resto del grupo.
¿Y qué pasará con el partido? Primero la Conmebol lo reprogramó para este miércoles, pero luego cambió y mantuvo la fecha original y por ahora se juesta este martes a las 18.15 hrs.
FUENTE EMOL
