Este martes el sindicato de trabajadores de Minera Escondida, la faena de cobre más grande del mundo, inició una huelga que mantiene a 2.397 operadores y mantenedores paralizados. ¿La razón? No alcanzaron acuerdo con la empresa, que les ofreció un bono por término de conflico de $27 millones a cada trabajador, además de beneficios como un reajuste salarial de 2% sobre el IPC, el aumento de las becas y bonos por las cargas y un plan de salud con cobertura del 100%.
La movilización trajo de inmediato de vuelta el fantasma del paro de 2017, que duró 44 días y que restó entre 0,4 y 0,5 puntos al crecimiento del PIB de ese año. En total las pérdidas por esa acción se elevaron hasta los US$70 millones. BHP, la controladora, por su parte, disminuyó en 21% su producción ese año, aunque debido al alto precio del mineral rojo igual terminó con ganancias.
Si bien un evento como el de ese año se ve difícil, son varios quienes han comenzado a preguntarse por los efectos que podría tener la paralización, tanto para el país como para BHP. ¿Veríamos un crecimiento más bajo? ¿Se afectaría la imagen de Chile?
Impacto en la economía del país
Boris Pastén, economista de la Facultad de Economía y Negocios de la U. Finis Terrae, explica que si se toma en cuenta que la minería del cobre contribuye un 10% al PIB, una paralización de un mes podría afectar en un 0.2% al crecimiento. “Esto significa que tendríamos un crecimiento cercano al 2% a final de año”, sostiene.
En esa línea, explica también que “el Imacec de agosto debería verse afectado por el sector minero, el que podría alcanzar cifras negativas. Sin embargo, dependiendo del contexto macroeconómico, podríamos observar alzas en el precio del cobre en el corto plazo, lo que favorecería al tipo de cambio”.
Por su parte, Marcos Lima, profesor del MBA para la Industria Minera de Ingeniería Industrial de la U. de Chile, sostiene que Escondida está produciendo alrededor de 3.300 toneladas diarias. Tomando el ejemplo del paro de 2017 explica que “si multiplicas esas 3.300 por 40 días, son 130 mil toneladas menos. Son cifras relevantes. 130 toneladas en un total de 5,5 millones, no deja de ser importante”.
Con eso en cuenta, sostiene que puede haber un impacto en la economía, pero dependiendo de cuánto se extienda la movilización. “Si la huelga dura 3 o 4 días es solo un ruido”, sostiene.
En tanto, el director de Núcleo Minero, Álvaro Merino, explica a El Mercurio que considerando el precio promedio del cobre a la fecha -de US$4,14 la librea- cada día de paralización implica del orden de US$ 27,5 millones en menores ingresos.
Impacto para BHP
Juan Nagel, académico del ESE Uandes, explica que “el impacto en la empresa dependerá, en parte, de la duración de la huelga, y de los términos en los que la huelga termina. Por ahora, el impacto sobre el precio de la acción de la empresa ha sido acotado, ya que las empresas se enfrentan a problemas laborales de forma más o menos rutinaria, sobre todo en períodos en los que el precio del cobre está relativamente alto”.
Así, dice no considerar que la huelga “tenga un impacto determinante sobre los resultados financieros de la empresa a mediano plazo”.
Marcos Lima, de la U. de Chile, por su parte, asevera que que el costo para la compañía es difícil de dimensionar, por los distintos factores. “El efecto al final dependerá de lo que ellos (en la empresa) esperaban”, dice.
No obstante, Lima observa que podría haber un efecto en la imagen de los trabajadores. Comenta que cualquier trabajador chileno aceptaría $27 millones por cierre de negociación colectiva.
A eso, agrega: “Cuando uno mira la cifra involucrada, no puede dejar de pensar de que esas cifras implican que todos los chilenos nos ponemos con el 40% al menos de esa parte, que son los impuestos que dejamos de ganar. Eso nadie lo dice”.
Y suma otra crítica: “Frente a todos los chilenos se están discutiendo cifras millonarias para cualquier trabajador chileno. A eso se añade algo que también es importante, que es que posiblemente todos los trabajadores de la minería están en el 10% más rico de la población”.
“El tema de imagen, no solo afecta a la compañía, sino también a los trabajadores mineros. Y eso no es bueno para la minería”, asevera.
La crítica del académico va en la línea opuesta de lo señalado por la CUT, que apuntó a una supuesta “precarización” de los trabajadores de la faena.
Fuente: Emol
