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Filipinas: Sorpresivo asteroide ilumina el cielo y arde

La caída de un asteroide iluminó brevemente el cielo del norte de Filipinas este jueves (05.02.2024). La brillante bola de fuego, que cambió de color al caer, fue captada en video por observadores de la provincia septentrional filipina de Cagayán, a unos 300 kilómetros al norte de Manila.

ScienceKonek, una página de Facebook que promueve la ciencia entre los jóvenes, compartió vídeos tomados por residentes de varias localidades de Cagayán.

Uno de los videos mostraba al asteroide “ardiendo en una bola de fuego verdosa” sobre la ciudad de Lal-lo, según ScienceKonek en un post.

“Según los informes que hemos recibido sobre el terreno, el brillo de corta duración en el cielo se observó hasta el sur de Metro Manila y las provincias de Cavite, Laguna, Batangas y Quezón, pero las mejores imágenes de la bola de fuego se obtuvieron sobre todo en el valle de Cagayán”, añadió.

Según la Agencia Espacial Europea (ESA), el asteroide, llamado 2024 RW1, era inofensivo.

La imagen quedó parcialmente oculta por las densas nubes en el norte de Filipinas, que había sufrido recientemente las inclemencias del tifón Yagi.

Asteroide es detectado antes de que llegue a la Tierra

El asteroide 2024 RW1 fue descubierto por Jacqueline Fazekas del Catalina Sky Survey, un observatorio cerca de Tucson (Arizona) financiado por la NASA. Esta es solo la novena vez que detectamos un asteroide antes de que llegue a la Tierra, aunque la ESA afirma que un asteroide de un metro golpea la Tierra cada dos semanas.

El empresario Allan Madelar, de 28 años, dijo a la AFP que esperó una hora en Gonzaga, un municipio de Luzón, para ver el meteoro con un amigo.

“Fue fascinante, el color era precioso. El cielo pasó del negro al verde azulado, al naranja y de nuevo al negro”, dijo. 

Audie de la Cruz, de 65 años, colocó su cámara en un puente de la ciudad de Tuguegarao, 142 kilómetros al sur de Gonzaga, para fotografiar el espectáculo celeste, pero la bola de fuego se apagó antes de que pudiera pulsar el obturador.

“Era como un renacuajo con una cabeza muy grande y muy brillante”, declaró de la Cruz a la AFP. “Puede que no consiguiera fotografiarlo, pero verlo fue una experiencia inolvidable”.

FUENTE DW

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