- El estatus jurídico del elemento atrasa el desarrollo de los proyectos en, al menos, un año y 10 meses más, según el académico de la UC Gustavo Lagos.
¿Es posible que Chile produzca 1 millón de toneladas de carbonato de litio en el futuro? Sí, es factible y se podría lograr hacia los años 2035-2040, pero solo si se mejora la competitividad de las inversiones, si se cuenta con la anuencia de las comunidades indígenas que están negociando en Antofagasta y Atacama, y si el Estado resuelve las contiendas de superposición de pertenencias, señaló el académico de la Universidad Católica, Gustavo Lagos. Con esta producción, Chile podría mantenerse como segundo productor mundial de litio y representar aproximadamente el 25% del litio primario o de mina.
“Chile podría lograr esto ya que tiene la producción de litio con costos más bajos del mundo”, dijo el experto, quien expuso en el evento “Conversaciones con el Desarrollo Económico: Hacia el Desarrollo Económico”, evento realizado por Deloitte, MBA UC y Cadem, donde también expuso el emprendedor y profesor Simon Litsyn, cofundador y CEO de XtraLit, una startup israelí fundada en 2021, especializada en extracción directa de litio.
Un obstáculo mayúsculo en el aumento de la producción es que el litio no es concesible y, según Lagos, esto añade al menos un año y 10 meses a la tramitación de cualquier proyecto, en comparación con lo que tardaría si fuera concesible. Esta tardanza adicional esta causada por la superposición de pertenencias y la otorgación de un contrato especial de operación y la consulta indígena, explicó.
De esta forma, el Fisco pierde 22 meses de tributación en el sistema actual, lo que representa una pérdida de US$ 375 millones en valor presente de los impuestos por cada 100 mil toneladas de producción adicional de carbonato de litio, argumentó el académico.
Por ello, calculó que llegar a 1 millón de toneladas en entre 11 años y 15 años más, le costará al Estado cerca de US$ 2 mil millones adicionales a lo que le supondría si estuviese en aplicación el sistema de concesiones como si fuese cualquier mineral.
“Este valor representa posiblemente todo o casi todos los beneficios que el Fisco pensaba recaudar por el valor de las pertenencias de litio”, hizo ver Lagos.
Y esto es en el mejor de los casos, es decir, si las consultas indígenas previas no duran más allá de 14 meses y si la negociación entre privados para resolver las disputas por la sobreposición de pertenencias no se extiende más allá de ocho meses, sostuvo el académico. “Como ninguna de estas dos actividades tiene límites de tiempo en la actualidad, es posible que la pérdida para el Fisco sea mayor que los US$ 2 mil millones”, aseveró.
El académico de la UC sostuvo que si al final de este Gobierno no hay nada más que el acuerdo entre Codelco y SQM para explotar el Salar de Atacama, “lo más probable es que políticamente se encuentren los votos para cambiar la ley y hacer que el litio sea un mineral concesible”.
Otros obstáculos para la industria
La concreción de los proyectos de litio es compleja debido a que obtener una Resolución de Calificación Ambiental (RCA) en la práctica no es el escollo mayor, sino que lo más difícil viene después del permiso ambiental, apuntó el exCEO y director ejecutivo de Minera Salar Blanco y Lithium Power International, Cristóbal García-Huidobro.
Esta compañía fue adquirida por Codelco en US$ 244 millones por su proyecto Salar Blanco en Maricunga.
Según García-Huidobro, si se realizan bien los estudios, la aprobación de la RCA es factible en un tiempo razonable, pero sostuvo que no es garantía de que la iniciativa se concrete. Esto, debido a que a nivel judicial quienes se opongan al proyecto pueden solicitar recursos de protección, recurrir por vía administrativa o ir al Tribunal Ambiental, “con lo que puedes estar cinco años o más peleando en tribunales”. Por ello, dijo García-Huidobro, solo las empresas con grandes espaldas financieras pueden aguantar este desgaste.
Por su parte, el vicepresidente senior de Servicios Corporativos de SQM, José Miguel Berguño, dijo que realizar un proyecto de litio como Salar Futuro les tomó 10 años. Detalló que el crecimiento en la producción en el marco del acuerdo con Codelco, que subirá desde 200 mil toneladas de litio a 300 mil toneladas supone un beneficio adicional al Fisco de hasta US$ 2 mil millones, dependiendo de los precios del mineral. Cabe señalar que en 2022 se logró un récord de aporte de US$ 5 mil millones.
Berguño señaló que con el actual régimen, el margen bruto de renta que va al Estado -que actualmente es de 60%- sube a más de 80% en el nuevo contrato a partir de 2031 y a 2060.
FUENTE DIARIO FINANCIERO