La tormenta Nicole se formó, según datos de Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, durante el fin de semana en el océano Atlántico, y actualmente su centro está a unos 800 Km del noroeste de Las Bahamas, con vientos máximos de 75Km/h.
La tormenta por ahora tiene categoría de subtropical, ya que presenta un sistema de baja presión no frontal y tiene características tanto de ciclones tropicales como extratropicales, pero los meteorólogos predicen que posiblemente se transformará en un sistema tropical a medida que continúa desarrollándose y luego a un huracán categoría 1 cuando se acerque a la costa de Florida, Estado Unidos, que sería aproximadamente este miércoles. De hecho ya se han levantado las alertas en el país norteamericano.
“No comenzaremos a ver ningún impacto significativo de Nicole hasta el martes por la noche o el miércoles, por lo que no debería tener un gran impacto en las operaciones de votación mañana”, dijo el especialista en huracanes Phillippe Papin a The Associated Press, refiriéndose a las elecciones de medio mandato en que los estadounidenses renovarán toda la Cámara de Representantes y 1/3 del Senado, que se llevarán a cabo este martes.
Sin embargo agregó que “desafortunadamente, esta va a ser una tormenta muy grande, con un campo de viento muy grande en el lado norte. Esto va a causar un oleaje bastante considerable, una marejada ciclónica potencialmente peligrosa en algún lugar a lo largo de la costa este de Florida, fuertes lluvias y probablemente vientos significativos”.
Las alertas de huracán están vigentes para el noroeste de Bahamas y la costa atlántica -al este- de Florida. En la costa va desde Hallandale Beach -al norte de Miami- hasta el norte de Daytona Beach, mientras que tierra adentro llega hasta el lago Okeechobee, según informó el Centro Nacional de Huracanes con sede en Miami.
“No se concentre en la trayectoria exacta de Nicole, ya que se espera que sea una gran tormenta con peligros que se extiendan hacia el norte del centro y fuera del cono, y afecten gran parte de la península de Florida y partes del sureste de los EE. UU.“, dijo el aviso de la institución.
Esta alerta se da en un momento en que gran parte de Florida todavía se está recuperando del destructivo huracán Ian, que azotó la parte suroeste del estado el 28 de septiembre como un fuerte huracán de categoría 4, con grandes cantidades de lluvia, causando inundaciones en el centro de Florida.
Las autoridades de los condados que se verán afectados advirtieron a los residentes que la tormenta tropical podría provocar más inundaciones y erosión de las playas solo unas semanas después de que el huracán Ian inundara la región con niveles de agua sin precedentes.
En el condado de Volusia, hogar de Daytona Beach, los funcionarios del aconsejaron a los residentes costeros que consideraran mudarse a un lugar más seguro lo antes posible.
“Se insta a los residentes a que se mantengan alejados de la playa durante al menos una semana debido a los peligros que presentan el viento, las olas altas y las estructuras dañadas de la playa”, comunicaron.
Fuente: Emol.com