“Como general director, como carabinero, como chileno, esposo y padre, no puedo callar ante lo que nos ocurre”, señaló la máxima autoridad policial.
Este jueves, se realizó el funeral del cabo primero Álex Salazar, quien murió dos días después de ser atropellado durante un procedimiento policial en Concepción por un ciudadano venezolano que se encuentra en prisión preventiva.
En ese contexto, el general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, informó que dispuso el ascenso póstumo del uniformado al grado de suboficial mayor.
“Frente a su familia, frente a sus camaradas, frente a la comunidad por la que dio su vida, anuncio que he dispuesto el ascenso extraordinario al grado de suboficial mayor como un reconocimiento póstumo a su vocación, compromiso y entrega por la patria”, dijo la autoridad policial en el culto evangélico que se realizó en honor al fallecido funcionario.
En medio de la ceremonia, Yáñez recordó a los mártires de la institución, señalando que “la pérdida de cada uno de ellos, y hoy de Alex, han dejado una cicatriz en nuestra familia, que es Carabineros de Chile. Son heridas que nos han provocado mucho dolor, que nos duelen y que, en realidad, nunca han sanado, porque son esas cicatrices las que nos recuerdan, día y noche, porque somos carabineros y porque nunca hemos bajado los brazos”.
“¿Cómo no nos va a doler? ¿Cómo no le va a doler al país perder a uno de los hombres que juró defender, con su vida, la paz, seguridad y tranquilidad de la nación? (…) sabemos que hoy la principal preocupación de los chilenos es la seguridad. El deseo de vivir tranquilos y en paz”, cuestionó el general director.
Finalmente, Yáñez señaló que “como general director, como carabinero, como chileno, esposo y padre, no puedo callar ante lo que nos ocurre. Lo dije el pasado lunes desde el dolor, que muchas veces excede el uso de la razón; pero hay que cuidar a quienes cuidan de nosotros”.
Fuente: T13