Desde el turismo catalogan como “un golpe de energía” el nuevo escenario, pero varios actores ven que Chile perdió tiempo frente a competidores regionales.
Una aprobación transversal al anuncio del fin de las restricciones de aforo y del pase de movilidad, expresaron algunos de los gremios que más se vieron afectados por la pandemia. Tras dos años y medio, tanto el comercio como la hotelería, la gastronomía, el turismo y la industria de eventos corporativos, así como las aerolíneas, podrán operar con mayor normalidad, lo que fue ampliamente reconocido por las entidades consultadas por PULSO.
El presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Ricardo Mewes, aplaudió el anuncio de la autoridad “en especial por sus positivas implicancias para el turismo, uno de los rubros más afectados por la crisis sanitaria”.
Desde la Cámara de Comercio de Santiago, en tanto, expresaron su “total aprobación a las medidas tomadas por la autoridad”, y valoraron especialmente la eliminación del pase de movilidad y las restricciones de aforo, “disposiciones que desde hace más de dos años han sido una traba para la recuperación del comercio”.
Junto con destacar el exitoso proceso de vacunación, la entidad afirmó que el levantamiento de las restricciones “contribuirá a normalizar el funcionamiento del comercio y de servicios presenciales, en beneficio de los consumidores, la actividad económica y el empleo”. Enfatizaron en que el impacto beneficiará a actividades como el turismo, entretención, cultura y espectáculos.
Paula Valverde, presidenta de la Asociación de Marcas del Retail, agregó que en el sector están “muy contentos que después de más de dos años muy difíciles para el retail, en el que debimos enfrentar un estallido social, una pandemia y sus consecuencias, y recientemente una inflación no vista en años, se realice este anuncio”.
Agregó que las medidas “llegan en un momento en que las cifras y la realidad nos muestran una desaceleración del consumo, por lo que esperamos que sea una inyección de entusiasmo para que las personas regresen, con toda seguridad, a visitar nuestros puntos de venta presenciales”.
La visión del comercio es respaldada por el gerente general de Espacio Riesco, Sergio Gutiérrez. “Es sin duda el momento que todos estábamos esperando. Por ello, estamos preparados para recibir y organizar eventos corporativos y todo tipo de encuentros de gran relevancia, tanto nacional como internacional”, señaló a PULSO.
“Para Espacio Riesco, el retorno presencial de los eventos y las ferias de negocios, sin restricciones, constituye un termómetro del resurgimiento de una industria que es motor importante dentro del turismo receptivo y desarrollo del país, además de ser un pilar fundamental para la salud mental de las personas, que quieren y buscan volver a divertirse y compartir luego de casi 3 años de incertidumbre”, agregó Gutiérrez.
El gremio que agrupa a los actores de la industria de los eventos, la Asociación Nacional de Empresas de Eventos y Turismo de Negocios (Aneet), a través de su presidenta, Pilar Villacura, celebró que se les permita “trabajar al máximo de la capacidad para reactivar nuestra industria que ha sido una de las más perjudicadas en la pandemia”.
Sin embargo, pidieron medidas adicionales “que permitan su re despegue financiero y económico”, apuntando “repactar o condonar las deudas tributarias que acumularon las pymes durante el período de la pandemia en que no pudieron funcionar, además el apoyo flexible de la Banca para enfrentar las deudas contraídas durante todo este tiempo.
Algo similar plantearon desde la entidad gremial que agrupa a las aerolíneas que operan en Chile, la Asociación Chilena de Líneas Aéreas (Achila). Su secretario general, Cristóbal Lea-Plaza, aseguró que “si bien Chile va en la dirección correcta de eliminar estas restricciones, llegamos tarde a la reactivación del resto de la región, y tenemos que tratar de recuperar ese terreno que perdimos hace varios meses atrás, con el objetivo que Chile recupere esos turistas y los niveles prepandemia”.
En su visión, países como México y Colombia “tomaron la ventaja, y eliminaron sus restricciones hace varios meses atrás, y hoy día no solamente igualaron los niveles prepandemia, sino que los superaron”. Dicha situación, a su juicio, se puede remediar retomando el proceso de rebaja a las tasas de embarque, proceso que se inició en 2018 y continuó en 2019, pero cuya tercera etapa fue suspendida a raíz de la pandemia.
“Golpe de energía” para el turismo
La industria turística -principalmente la que depende de los visitantes internacionales- fue una de las más afectadas con las restricciones y el “cierre de fronteras sanitario” de Chile. Los actores de este sector empezaron a esbozar las primeras sonrisas a principios de junio, cuando el gobierno flexibilizó la entrada de extranjeros, proyectando ventas para la temporada alta del verano 2022-2023 de, en promedio, 25% con respecto a un año normal de prepandemia. Un pequeño respiro.
Pero, los cambios del 1 de octubre, son “un verdadero golpe de energía para nosotros”, dice entusiasmado Alberto Pirola, presidente de Hoteleros de Chile, quien indica que ahora, la proyección de ventas para el próximo periodo estival es de un 40% del nivel prepandemia. “Esto nos simplifica la vida, porque ya estábamos teniendo problemas con muchos clientes que consideraban que incluso no era legal lo que se estaba haciendo en Chile. Había que ponerse a nivel del mundo y esperamos con esto retornar a la normalidad”, agrega Pirola
Según el dirigente gremial, la estrategia ahora es “salir a cazar los clientes”. “Perdimos mucho tiempo como marca país. Perdimos posicionamiento y ahora hay que recuperarlo. Hay que viajar y moverse, ya que hay mucho interés de viajar a Chile”, indica, e insiste en que ahora Chile debe dar a conocer fuertemente en el extranjero la liberación de las restricciones.
De una opinión similar es Jaime Guazzini, presidente de la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur). “Valoramos que la autoridad haya acogido el fin de estas restricciones, las que en esta etapa de la pandemia no se justifican desde ningún punto de vista y perjudican a varios subsectores de la industria del turismo”, dice Guazzini, agregando que esto les permitirá recuperarse “de forma importante, de cara a la temporada alta, sin restricciones, permitiendo dejar atrás la pandemia y generando más empleos”.
Desde esta industria indican que el primer subsector del turismo internacional que se recuperaría rápidamente es el relacionado a los negocios, concentrado principalmente en Santiago y asociado a eventos corporativos. Luego, vendría el del turismo recreacional y de intereses, enfocado principalmente en los tres destinos ícono de Chile en el exterior: Isla de Pascua, San Pedro de Atacama y la Patagonia. Este último incluye principalmente al sector de Torres del Paine y los lodges de pesca. “El fin de estas restricciones es una medida muy esperada que va en línea con lo que se vive en otros países, por lo que mejora la posición de Chile como destino turístico, donde claramente la experiencia de nuestros visitantes se verá beneficiada” comenta Eustaquio Martínez, gerente general de Tánica Hoteles, grupo que posee instalaciones en los tres destinos.
Asociado a la hotelería, el sector gastronómico también estuvo en la UTI en algún momento, con altos y bajos. Por eso que el fin de pase de movilidad y uso de mascarilla ( a excepción de los recintos de salud) “nos pone al día de lo que han hecho la mayoría de los países, que es ir dejándolas atrás, ya que ambas han perdido eficacia y no se justifican en el escenario actual de pandemia. Liberar estas restricciones nos permitirá trabajar con mayor libertad y en condiciones normales, mejorando las condiciones para la recuperación de la industria”, señala Máximo Picallo, Presidente de la Asociación Chilena de Gastronomía (Achiga).
Según esta entidad, cerca de un 30% de los locales cerró durante la pandemia, de los cuales ya han reabierto algunos. Además, estiman que las ventas este año pueden aumentar un 20% con respecto al 2021, pero están lejos de lograr los niveles de prepandemia, porque además – indican desde Achiga- el factor inflación frena la recuperación.
Fuente: La Tercera