“¿Problema entre privados?”. Así tituló la carta al director Valentina Correa, hija del empresario viñamarino asesinado en la puerta de su casa debido a que el líder de una toma en uno de sus terrenos lo mandó a matar.
Teniendo ese antecedente, Correa se refirió a un terreno tomado de forma similar en Quillota de la familia Easton: “Con estupor leí la nota publicada ayer en ´El Mercurio´, donde el delegado de la Región de Valparaíso y el alcalde de Quillota dicen que la usurpación del terreno de la familia Easton es un ´problema entre privados´ en el que ellos no se pueden meter”, dijo.
Luego, la viñamarina comentó que “un terreno de mi familia fue tomado de similar manera en Quilpué y cuando reclamamos ante la justicia, el responsable de la usurpación mandó a matar a mi padre. Sugerirles a los dueños de los terrenos que la vía de recuperación es la acción civil muestra, por un lado, indolencia ante el miedo que supone enfrentarse a esas mafias y, por otro, una excusa para no utilizar las facultades que les entrega la norma”.
Asimismo, explicó que “La Ley General de Urbanismo y Construcción entrega facultades expresas para paralizar y demoler aquellas construcciones y loteos que contravienen los planes reguladores, independientemente de si son terrenos fiscales o privados”.
Así, para terminar, Correa agregó en el último párrafo que “Afortunadamente la alcaldesa de Quilpué ha tenido una actitud distinta y también he visto que el ministro Montes ha condenado el hecho. Corresponde que el Estado imponga la ley para que recuperemos lo secuestrado, usando todas las herramientas legales que tiene a disposición. Pero primero nos debemos poner de acuerdo en que estamos hablando de un crimen contra el desarrollo justo de la ciudad y no de un conflicto entre pares”.
Fuente: Emol.com