El documento plasmaría las condiciones de pago por disponibilidad de las centrales que conforman el sistema eléctrico, lo que genera cuestionamientos por las incertezas que podría brindar al sector.
Con el incentivo de ampliar la participación de tecnologías limpias, el Gobierno, en conjunto con diversos actores de la industria, discute un nuevo reglamento de potencia, documento que plasma las condiciones de pago por disponibilidad de aquellas centrales que conforman el sistema eléctrico.
La nueva propuesta de reglamento, que comenzó a tramitarse hace dos años aproximadamente, recibió más de 900 observaciones antes de ingresar a Contraloría el 17 de febrero de este año para su tramitación -entre los principales cuestionamientos se apuntaba a que la iniciativa no aprovechaba la oportunidad para facilitar la entrada de tecnologías como el almacenamiento, clave para enfrentar las dificultades que existen en líneas de transmisión.
Pero junto con el arribo del ministro Diego Pardow a la cartera de Energía, el 21 de septiembre pasado el Ejecutivo decidió retirar el texto de la oficina general de partes con “el objetivo de evaluar ajustes a la forma y temporalidad de su implementación”, según señalaron desde el Ministerio a Emol.com
El mercado de potencia, corresponde a las remuneraciones que reciben las empresas por aportar capacidad al sistemas en las horas del día en que el sistema eléctrico requiere abastecer las mayor demanda -periodos punta-. ¿Cómo se obtiene? Mediante un balance anual que realiza el Coordinador para identificar y financiar a las centrales que suministran energía, detalla el medio.
Mesa de trabajo
A partir de noviembre se instaló una mesa de trabajo con la industria, que -de acuerdo al Gobierno- busca “mitigar los potenciales impactos de la propuesta reglamentaria en los distintos agentes del sector, sin perder de vista el objetivo de política pública del reglamento: incentivar una matriz con suministro flexible y gestionable que apoye el proceso de descarbonización”. A este respecto, desde Energía aseguran que se encuentran revisando los antecedentes presentados por la industria, para tener una reunión final a mediados de enero de 2023 para luego reingresar la propuesta a Contraloría.
Hasta el momento el texto no ha tenido una buena acogida entre los incumbentes, pues existe consenso en la industria de que este mecanismo no es el adecuado para brindar certeza al sector, además de fomentar inversiones que aporten estabilidad y flexibilidad al sistema eléctrico en un escenario de estrechez energética.
Fuente: Reporte Minero