En el marco de la Mesa Nacional del Agua, la Dirección General de Obras Públicas del MOP, está elaborando un Plan de Inversión en Iniciativas Hídricas (PIIH) 2050 que se dará a conocer próximamente.
No está previsto que dicho plan se pronuncie sobre la solicitud de concesión por iniciativa privada del Proyecto Aquatacama o Río Submarino Sur Norte Chile -que está todavía a la espera de su eventual Declaración de Interés Público-; sin embargo, es importante señalar cómo la naturaleza de este Proyecto le permitirá integrarse perfectamente en la gestión de los recursos hídricos chilenos y adaptarse a cualesquiera sean las inversiones derivadas del PIIH, y de manera más general, a cualesquiera sean los resultados de la Mesa Nacional del Agua.
La principal característica del Río Submarino es que permitirá alcanzar una interconexión total de todos los recursos hídricos del país, cualquiera sea el estado hidrográfico de las distintas cuencas, en cada momento. El Proyecto parte de nivel del mar y llega al nivel del mar, lo que permite que el agua circule tanto de Sur a Norte (sentido normal ya que existe disponibilidad de agua en algunas cuencas sureñas según varios estudios académicos fehacientes) como de Norte a Sur (sentido excepcional para, por ejemplo, utilizar parcialmente los episodios de lluvias torrenciales traídas por los inviernos altiplánicos).
Puesto que las ofertas y las demandas hídricas tienen evoluciones estacionales y tendenciales distintas a lo largo del país, muchas cuencas podrán alternarse como “dadoras” o “receptoras” a lo largo de las estaciones o de los años; particularmente en razón de los efectos de las inversiones futuras realizadas a raíz del PIIH o de otras medidas impulsadas por la Mesa Nacional del Agua. Por ejemplo, cuando los embalses o napas locales (actuales o futuros) de una determinada cuenca se encuentren en su cota máxima, las aguas excedentes podrán acumularse en embalses o napas más al Sur (y no sólo más al Norte) que tuvieran capacidad disponible, cualesquiera sean las fuentes de agua (actuales o futuras) proveedoras de dicha cuenca.
Esa característica esencial, única y exclusiva del Río Submarino, asegura que todos los embalses, reservorios o tranques del país estén siempre llenos y que las demandas hídricas en su totalidad estén siempre debidamente satisfechas, a lo largo de la extensión geográfica que se le quiera dar al Proyecto. El Proyecto es extensible hacia el Norte, pudiendo considerar Arica como último punto nortino de entrega. Asimismo, puede extenderse tan al Sur como deseado o requerido, para captar la fracción autorizada de cualquier disponibilidad de agua en los ríos sureños.
El Proyecto tiene la capacidad de integrar las cuencas hidrográficas del país en un gran sistema de vasos comunicantes, una macro-cuenca, generando así un aprovechamiento máximo de su riqueza de agua, y equiparando dichos recursos para satisfacer debidamente sus necesidades hídricas: Chile dispondrá así de una seguridad hídrica total y permanente a lo largo de todo su territorio.
Luego, el Río Submarino proporciona un grado de libertad suplementario, ya que autoriza una reflexión que no está limitada a equilibrar oferta/demanda cuenca por cuenca, sino que puede ampliarse a un equilibrio a nivel de la macro-cuenca nacional en su conjunto. Queda pues demostrado el carácter intrínsecamente complementario del Río Submarino con cualquier opción que diseñe el PPIH o que impulse la Mesa Nacional del Agua, pudiendo integrar todas las gestiones individuales por cuenca en una única, la gestión de la macro-cuenca Chile.