La ministra del Trabajo, Jeannette Jara, insistió en su defensa al dictamen que emitió la semana pasada la Dirección del Trabajo (DT) en el que se zanjó que la reducción de la jornada laboral a 44 horas a la semana -que entra en vigencia el viernes- no puede subdividirse en reducciones de minutos diarios.
Se trata de un pronunciamiento que ha generado la molestia del sector privado, asegurando que este atentaría contra la flexibilidad establecida en la ley y considerando, además, que empresas ya habían delineado los mecanismo para cumplir con la normativa. Lo anterior, teniendo en cuenta también que el mismo director del Trabajo, Pablo Zenteno, había señalado en un principio que el fraccionamiento de la hora de disminución sí estaba permitido en el ley, más allá de que no fuera la fórmula recomendable.
En un punto de prensa en el Palacio de La Moneda, Jara primero respondió a las críticas del presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), José Pakomio, comentando que “es bueno señalarle que los dictámenes salen precisamente a partir de las dificultades en la implementación de las leyes, por lo tanto muchas veces son posteriores al inicio de la vigencia. En este caso, el dictamen salió antes porque se detectó un uso abusivo del espíritu de la ley y del contenido mismo de la ley en torno a rebajar la jornada laboral por minutos”.
Dicho eso, sostuvo que la rebaja de la jornada laboral semanal “va a transcurrir de la siguiente forma: si hay un acuerdo entre empleador y trabajador sobre la hora en que se reduce la jornada laboral, va a operar el acuerdo. Si no hay un acuerdo, los empleadores van a poder unilateralmente rebajar la jornada laboral en una hora, un día de la semana”.
“En Chile la jornada laboral es de 45 horas a la semana, no es de minutos ni de segundos, para que no nos metamos triquiñuelas entre nosotros, considerando que este es un proyecto de ley que costó tanto sacarlo adelante, que viene en base a un acuerdo importante y que además se aprobó muy ampliamente en el Congreso Nacional”, agregó.
En ese sentido, la titular de Trabajo recalcó: “La implementación hay que hacerla de buena forma y eso implica no andarle buscando el resquicio para darle la vuelta a lo que la ley quiere legislar, que es tener una mejor calidad de vida”.
De todas formas, finalizó señalando que “si hubiese algún trabajador al que le sirviera una modalidad de minutos, en ese caso ese acuerdo va a ser revisado con estricto apego a la legalidad y con mucho rigor”.
Fuente: Emol.com
