Hemos conocido anteriormente casos de mujeres que se enteraron que estaban embarazadas poco antes de dar a luz, pero el de la británica Emmalouise Leggate es realmente sorprendente.
Tal como relata el diario inglés The Mirror, la joven de 19 años fue a dormir con su vientre plano y quedó atónita cuando despertó con la panza abultada y fuertes dolores.
Emmalouise vivía con su madre Jackie Ford y su hija de un año, Caoimhe, en ese momento. Cuando todo ocurrió, Jackie inmediatamente le pidió a Louise -la abuela de la chica- que llevara a la joven al hospital.
Mi abuela dijo: “Definitivamente es un bebé, pero no creo que estés lista para dar a luz en este momento”.
Según Emmalouise, había estado tomando píldoras anticonceptivas y no tenía idea de que estaba embarazada por segunda vez hasta que se despertó con fuertes contracciones.
Fue así como la joven y su abuela corrieron al hospital, pero todo fue tan rápido que tuvo al bebé en el estacionamiento del recinto asistencial solo 45 minutos después de ver su vientre abultado.
“Para cuando subí al auto, las contracciones se presentaban cada dos minutos y luego se me rompió la fuente. Acabábamos de estacionarnos afuera del hospital y mi abuela me dijo: ‘espera cinco minutos, ¿no puedes esperar cinco minutos?’ y simplemente no pude”, relató.
Emmalouise dijo que no tuvo náuseas matutinas, ni antojos de comida, ni nunca sintió movimientos en su abdomen.
“No me había realizado una prueba de embarazo, no tenía síntomas, nada. Nada de nada”, indicó la mujer al diario. “Al comienzo de usar la píldora estaba sangrando un poco, pero luego mis periodos se detuvieron por completo, así que pensé que era la píldora”, expresó, reconociendo que hubo periodos en que se saltó la pastilla.
Los médicos creen que la bebé, llamada Ciara Louise Lamont, ahora de ocho meses de edad, nació de término completo, es decir, cumplió los 9 meses de gestación.
La joven madre dijo que la protuberancia en su vientre apareció de la nada y que al parecer la posición del bebé favoreció que no le creciera la panza.
“Los médicos no pudieron explicar por qué no tuve el vientre abultado. Simplemente me dijeron que la bebé debió estar sentada en mi espalda baja y que es bastante común”, comentó.
Afortunadamente, la guagua nació saludable. Pesó 3.2 kilos, considerada una medida completamente normal para un bebé de término.
“Una vez que el bebé comienza a patear, las personas tienden a descubrir sus embarazos alrededor de las 20 semanas, pero Ciara nunca pateó, nunca sentí que ella lo hiciera”, agregó.
Aunque Emmalouise subió de peso durante la gestación, no fue demasiado por lo que ni siquiera lo vinculó a un posible embarazo.
“Había engordado un poco, por lo que mi mamá me sugirió que saliéramos a caminar e hiciéramos cosas diferentes para quemar calorías”, afirmó, añadiendo que “el peso estaba distribuido en todo mi cuerpo, más en mis brazos, piernas y cara que en cualquier otro lugar. Mi estómago nunca creció”.
“Pero di a luz a Ciara. Fue un trabajo de parto muy rápido. Fue bastante pulcro. Era muy pequeña y todo estaba en la parte superior, supongo que se había dado la vuelta”, aseguró.
Homenaje a su abuela
“Tan pronto como ella nació, mi abuela estaba tan conmovida, y afortunadamente tenía una gran cubierta en el portamaletas, así que nos las arreglamos para envolverla en eso”, dijo la joven madre, quien le puso “Louise” como segundo nombre a su bebé en honor a su abuela, que lamentablemente falleció un par de meses después de que naciera Ciara.
De hecho, Emmalouise reveló que su abuela estaba tan orgullosa que detenía a la gente en la calle para presentar a la bebé.
“Paraba a la gente en la calle diciendo: ‘esa es mi bisnieta, mira lo hermosa que es””, contó. “Mi abuela tenía un vínculo especial con ella. Creo que esto sucedió por una razón”, agregó.
Tanto Emmalouise como su hija permanecieron en el hospital durante dos días para que los médicos pudieran realizarles exámenes, pero todo estaba bien.
Pese a que la joven cree que Ciara es “lo mejor que le podría haber pasado”, ella y su pareja decidieron cambiar su método anticonceptivo por un dispositivo intrauterino. “Fue lo mejor que pudo haber ocurrido, pero ya no tendremos más. No más bebés sorpresa, gracias”, indicó.
Fuente: Biobiochile