Los acusaron de “venderse”, de aliarse con la “izquierda radical”, de no honrar a Jaime Guzmán; todo eso en la discusión de la reforma, que inicia un proceso constituyente 2.0, y a la que la centroderecha adhirió y el partido de Kast, no. Al menos cuatro episodios polémicos entre ambas derechas se dieron por estos días, lo que, dicen, tensiona los ánimos para actuar unidos en las acusaciones constitucionales. No solo eso: se hace cada vez más complejo competir unidos en la elección de consejeros y replicar el pacto de 2021.
“Estimado Diego, yo sigo siendo el mismo y, creo, las personas valoran la coherencia y consecuencia”, escribió en su cuenta de Twitter el excandidato presidencial José Antonio Kast este martes cuando minutos antes los ánimos en la comisión de Constitución se habían tensionado.
El mensaje refleja la principal crítica del Partido Republicano hacia los partidos de la centroderecha, que esta semana se agudizó con una serie de desencuentros públicos a raíz de la discusión del inicio del segundo proceso constituyente.
Con una fotografía de Diego Schalper, diputado miembro de la comisión de Constitución y secretario general de RN, del momento en que el exrepublicano Gonzalo de la Carrera increpaba al parlamentario por votar en contra de la censura hacia Karol Cariola, Kast posteó: “La izquierda, apoyada por diputados de Chile Vamos, rechazó la moción de censura en contra de la diputada del Partido Comunista Karol Cariola, a cargo de la comisión de Constitución. La izquierda sigue dominando las comisiones a falta de una real oposición”.
A lo que Schalper respondió: “Señor Kast: la política, para no terminar como Brasil, tiene que ser seria y no con montajes infundados, como esta censura. Contribuya a la estabilidad, el diálogo y el respeto, cosas claves para el futuro de Chile. Ser oposición no es sinónimo de degradación de las personas”.
La discusión en torno a quiénes representan mejor a “la verdadera derecha” por estos días se ha vuelto más compleja, sobre todo en el Congreso, con al menos cuatro episodios.
Justamente De la Carrera había encarado a Schalper por no haber apoyado dicha censura que, para Chile Vamos, era solo un intento del Partido Republicano por dilatar la discusión de la reforma que dio por iniciado esta semana el nuevo proceso para redactar una nueva Constitución.
“Presidenta, ¿puede dar una pausa para que Republicanos suba sus videos y podamos continuar? Gracias”, fue la frase con la ironizó esa jornada Schalper en frente del diputado republicano y único miembro de la comisión de Constitución, Luis Fernando Sánchez (Partido Republicano), a raíz de la “difusión” que realizan los parlamentarios en torno a las votaciones de Chile Vamos, en muchos casos, llamándolos traidores por llegar a acuerdos con la centroizquierda.
“Hay varias frases molestas… tildan de incitar el odio por informar a los electores por cómo votan sus representantes”, dijo Johannes Kaiser en sus redes sociales.
Mientras, Sánchez, después del desencuentro en Constitución, dijo en una conferencia de prensa: “Hoy día hemos visto en la comisión de Constitución lamentablemente cómo Chile Vamos decidió aliarse con el Partido Comunista, con la izquierda radical”. En la bancada se implementaron “sistemas de turnos” para acompañar a Sánchez, pues, dijeron, el ambiente era demasiado hostil. El republicano, de hecho, votaba solo -a favor- casi todas las indicaciones. Hubo excepciones, como por ejemplo, en aquella que hacía referencia al derecho a la vida del que está por nacer, donde el diputado UDI Gustavo Benavente votó a favor. Fue sorprendente para Sánchez, por lo que en ese momento, se paró de su puesto y camino hacia el otro extremo de la mesa para ir hasta el asiento de Benavente y agradecer ese apoyo.
“A pesar del bullying, estuvieron defendiendo nuestras convicciones”, destacó la diputada Gloria Naveillán, exrepublicana, sobre la discusión en la comisión de Constitución.
“Vendidos”, “Trucaron fotos con Kast”, “le costó la vida a Jaime Guzmán”: las frases más polémicas
En la discusión de la reforma que habilita el proceso constituyente 2.0, los diputados se enviaron duros mensajes públicos.
El jefe de bancada del Partido Republicano, José Carlos Meza, reprochó en la Sala que Chile Vamos había apoyado desesperadamente a José Antonio Kast en la elección presidencial y recordó que su candidato, Sebastián Sichel, salió segundo. “Trucaron fotos con José Antonio Kast para recoger el apoyo ciudadano que tenía, ellos saben quiénes son”, recordó en una suerte de llamado de votar en contra de este nuevo proceso constituyente.
“Vamos a mantener nuestra línea, no nos moveremos ni un centímetro de nuestras ideas. Tienen una última oportunidad de votar en conciencia. No se dejen intimidar por la izquierda. Si quieren una foto de con José Antonio Kast, pídansela después de votar en contra”, dijo Meza.
El diputado Agustín Romero, en tanto, aludió al senador asesinado Jaime Guzmán, fundador de la UDI: “En estos últimos 100 días ha sido triste ver a la centroderecha menospreciar el significado de ese voto en contra que le costó la vida a Jaime Guzmán”, dijo y añadió que es triste ver a Chile Vamos “sentándose en la misma mesa con los que prometen levantar en la zona cero del estallido delictual un memorial al delirio ‘octubrista’”.
Mauricio Ojeda, diputado por La Araucanía, en tanto, trató de “vendidos” a los parlamentarios de Chile Vamos. “Las indicaciones que agregamos como bancada defendían el derecho a la vida, el derecho preferente de los padres para la educación, principios que se suponen compartimos con muchos parlamentarios de Chile Vamos, el problema es que votaron en contra por ello que fueron electos. Aquel que vota en contra de sus convicciones y lo que comprometió a la gente es un vendido”, señaló.
Cristián Araya, por su parte, hizo ver las diferencias en torno al rol opositor. “Existen dos oposiciones. Una que se ‘indigna’ con los indultos, pero al día siguiente hace como que no ha pasado nada, continuando con su gran “acuerdo” para una segunda convención (y una reforma tributaria cocinada que aumentará los impuestos) y está la oposición”, sostuvo el representante del distrito 11.
Desde Chile Vamos, Schalper, en el hemiciclo, aludió a los republicanos: “El que hoy el marco constitucional tenga un problema de legitimidad no es una reflexión; es un hecho de la causa. Ante ese hecho se pretendió dar una respuesta, que era refundar Chile y eso Chile lo rechazó por una amplia mayoría. Otros creen que, ante ese hecho, la alternativa es dejar todo como está y asilarse en que el statu quo nos va a resolver el problema. Pero colegas, eso tiene problemas: no encarna el 62% que rechazó el texto, porque la inmensa mayoría lo hizo porque quiere una mejor Constitución, no porque quieran dejar todo como está. Incluso los más críticos de este Congreso suscribieron una franja electoral que decía ‘Recházala por una mejor’ y lo hicieron porque en ese minuto entendían -ahora quizás lo desconocen- que lo que tenía mayoría en Chile, que lo que tenía transversalidad y que lo que sustentó ese 62% era no el inmovilismo sino una alternativa mejor”.
Acusaciones constitucionales: un elemento que los tensiona
Aunque por estos días el gobierno vive su crisis más dura desde que asumió en marzo de 2022, la derecha en el Congreso protagonizó su propia batalla. Esta crisis del gobierno de Gabriel Boric ha provocado que haya distintas miradas en torno a cómo actuar en el rol opositor.
El mismo martes de la discusión Kast-Schalper, dos diputados de la bancada republicana -Leonidas Romero y Johannes Kaiser- junto a otros parlamentarios, como Gonzalo de la Carrera y Gloria Naveillán (exrepublicanos), informaron, con texto en mano, que tenían ya redactada una acusación constitucional contra el Presidente Boric. Sin embargo, acusaron que hubo quienes “se arrepintieron” de firmarla por lo que, agregaron, no tenían los apoyos necesarios para presentarla.
Justamente la discusión si presentar o no una acusación contra el mandatario ha sido motivo de arduos debates al interior de las bancadas de Chile Vamos. La mayoría de ese conglomerado, de hecho, se inclina por resguardar la figura presidencial -por un tema institucional- y apelan a que no se deben convertir en la misma clase de oposición “obstruccionista” que, dicen, fue el Frente Amplio.
De todas maneras, el Partido Republicano todavía no toma una decisión al respecto, pues al menos hasta ahora están concentrados en la acusación constitucional en contra de Giorgio Jackson. En paralelo, Chile Vamos presentó la misma ofensiva contra la renunciada ministra de Justicia, Marcela Ríos. En ambas comisiones revisoras de dichos libelos hay integrantes republicanos y de Chile Vamos, por ende, saben que en algún punto tendrán que bajar la tensión y dialogar. Tampoco es claro aún que Chile Vamos apoye la acusación contra Jackson, hay dudas.
En esas acusaciones, tampoco hubo una coordinación previa a su presentación entre ambos sectores lo que, apuntan, devela la poca comunicación que existe.
¿Calmar las aguas? En el Partido Republicano al menos reconocen que la próxima semana intentarán tomar acercamientos con las bancadas UDI y RN.
Elección a la vista: se aleja la idea de lista única
¿Enturbian estos hechos un eventual pacto de cara a la elección de consejeros de mayo próximo? Para varios, tanto en Chile Vamos como en el Partido Republicano, previo a esta semana, ya se veía complejo alcanzar dicho acuerdo, es decir, replicar la alianza de convencionales de 2021. Principalmente porque en la colectividad de Kast tienen convencimiento de que podrían tener mejores resultados solos que acompañados de la centroderecha. Siempre relevan que en sondeos públicos y privados existe una mayor identificación de la gente de derecha con su partido que con el conjunto de colectividades de Chile Vamos.
En todo caso, voces como Jorge Alessandri, jefe de bancada de la UDI, han abogado por ir en lista única para alcanzar una mayoría en el consejo constitucional.
Este jueves, el presidente de la UDI, Javier Macaya, al ser consultado sobre si existe posibilidad de competir con el Partido Republicano, respondió: “Nuestra lista se va a constituir con personas que quieran tener una buena y nueva Constitución”.
En el gremialismo aún existen voces -más que en RN- que apuntan a construir un pacto conjunto justamente bajo la premisa de que el Partido Republicano acapara más electores de la UDI.
Este viernes, en tanto, el diputado Meza también fue tajante, algo que había evitado hasta ahora. “No existe ninguna posibilidad para nosotros de hacer lista con Chile Vamos”, dijo y relevó: “Yo no estaría dispuesto a que apoyáramos candidatos que defiendan un Estado Social y Democrático de Derechos, como lo ha dicho el presidente de la UDI”.
En Chile Vamos enfatizan en que la discusión con los republicanos estuvo mayormente enfrascada entre RN y el partido de Kast y que, en ese sentido, la UDI tomó distancia de polemizar, lo que dejaría algún puente comunicante con los republicanos.
A algunos RN, de hecho, les pesó la posición de los republicanos: hubo cuatro descolgados que no apoyaron el Acuerdo por Chile en su votación en la Sala, aunque en el partido desdramatizan ese hecho. En la UDI, en contraste, solo hubo votos a favor y una abstención.
El tiempo es otro factor: en menos de un mes, el 6 de febrero, las listas deben ser inscritas ante el Servicio Electoral.
Fuente: T13