Un nuevo proceso constituyente inició esta semana tras la aprobación y publicación de la reforma constitucional que viabilizó el acuerdo logrado por los partidos, y si bien fue celebrado amplia y transversalmente, no todos sacaron cuentas tan positivas. Es el caso del Servicio Electoral, que al mismo tiempo que iniciará las gestiones para auditar el padrón electoral y preparar los comicios que vienen, manifiesta “preocupación” por la omisión de la autonomía de este órgano en las bases institucionales del nuevo proceso, y por el rechazo a incorporarla durante la tramitación del proyecto de reforma constitucional.
Esto porque a pesar de las gestiones del Servel para que los parlamentarios sumen una mención explícita en la moción, ninguna de las indicaciones presentadas para estos efectos se aprobó, por lo que la autonomía de este órgano deberá ser discutida nuevamente durante el proceso.
Las peticiones por parte del Servel iniciaron el 26 de diciembre públicamente, cuando el presidente del Consejo Directivo, Andrés Tagle, abordó varias materias que tocaban al organismo que dirige en la Comisión de Constitución del Senado y solicitó que se consagre también su autonomía. “Dejamos de aparecer, solo dice Justicia Electoral. A nosotros se nos declaró autónomos constitucionalmente en 2015 y creo que con todo lo que se nos ha exigido, hemos honrado la autonomía, con creces”, aseguró.
El argumento detrás, como se dijo en la tramitación de la reforma que les dio esa autonomía en 2015, es la señal que se da con respecto a su independencia de los otros poderes, con lo que la función electoral queda diferenciada del rol que corresponde a la administración del Estado. Esto fue recogido también en el texto que elaboró la extinta Convención.
Pero no existieron indicaciones en esa comisión para incorporar eso, aunque el reclamo sí llegó a oídos de los senadores y Paulina Núñez (RN) propuso en la sala del Senado incorporarlo, argumentando que con un cambio así “no veo que se pase a llevar las bases” y que el objetivo era “que le demos un respaldo, una señal, a uno de los órganos que hizo posible llegar a esta instancia y nos hizo ser ejemplo a nivel mundial”.
Recibió solo nueve votos a favor. Quienes acompañaron a Núñez fueron tres senadores más de su partido, además de Esteban Velásquez (FRVS), Karim Bianchi (IND) y Juan Antonio Coloma (UDI), entre otros.
“Todo el mundo quiere incluir algo. Si incluimos algo se abre la caja de Pandora y hay que negociar de nuevo todo el acuerdo”, explicó el senador José Miguel Insulza (PS), que votó en contra, pero manifestando que estaba a favor de la idea.
Luego de aquel capítulo, el Servel emitió una dura declaración argumentando que ” la omisión de la autonomía constitucional representa un grave retroceso de la institucionalidad chilena”.
“El hecho de contar con elecciones transparentes, confiables y legitimadas por los diversos actores del sistema político dan cuenta de un desempeño y trayectoria histórica de un Servicio Electoral fuerte, autónomo y profesional”, señalaron.
“Estos son tiempos en que la autonomía constitucional de Servel debiese ser indiscutida. Es más, debiese ser respaldada y defendida por todos los sectores comprometidos con la democracia a lo largo de la historia del país”, se lee en el texto.
Rechazos también en la Cámara de Diputados
El trámite en la Cámara de Diputados fue similar. La Comisión de Constitución de esa corporación recibió nuevamente a Tagle, quien reiteró las aprensiones del órgano, y esta vez sí aparecieron en una indicación firmada por el Partido Republicano que además incluía a las municipalidades y a la Contraloría General de la República como entes autónomos.
También se rechazaron, al igual que el resto de las más de 300 indicaciones formuladas por distintos parlamentarios. Luego, en la sala de la Cámara no se repuso ninguna indicación y el texto quedó idéntico a cómo salió del Senado.
“Espero que la Comisión Experta reconsidere el tema y nos incluya como autónomos en el anteproyecto”, dice Tagle a Emol.
Las explicaciones de los parlamentarios
A pesar de los constantes rechazos, los parlamentarios apuntan a que consideran que el Servel sí debería ser autónomo, y que la omisión de este punto en las bases institucionales negociadas por los partidos respondió a un criterio de qué era lo mínimo que podían concordar entre distintos sectores. Luego, la necesidad de respetar ese acuerdo y no seguir sumando elementos que no estaban originalmente.
En esa línea, avanzar en consagrar la autonomía del Servel desde este momento abría la puerta para hacer lo mismo con otros entes, como alguna superintendencia, por ejemplo, que ya debería ser materia de discusión en el proceso constituyente según estas mismas voces.
“Nosotros creemos en un Servel autónomo y fortalecido, las bases son un piso y no un techo y tengan el compromiso de que Chile Vamos, en el Consejo Constitucional, nos la vamos a jugar por la autonomía del Servel, pero las bases es el mínimo común denominador que logramos construir entre las distintas fuerzas políticas”, explicó el diputado y secretario general de RN, Diego Schalper.
“Hay cosas que me habría encantado que hubieran estado y no están, obvio, eso es lo más parecido a un acuerdo y por lo tanto que el Servel tenga la tranquilidad que esa omisión va a ser corregida durante el proceso constitucional”, añadió.
Además, los mismos parlamentarios remarcan que lo que sí o sí debía estar garantizado era la justicia electoral, y eso sí quedó establecido. , “Cuando hablamos de principios republicanos, se da por hecho que los poderes electorales tienen autonomía respecto a los poderes constituidos, alguien que va a ser elegido no puede ser juez y parte a la hora de calificar una elección, por lo tanto las precisiones del Servel han sido plenamente discutidas en las bases institucionales cuando hablamos de principios republicanos”, planteó Diego Ibáñez, diputado y presidente de Convergencia Social.
“Las bases son bases, no es que allí se reduzca todo el principio que va a erigir la nueva Constitución”, sumó.
Fuente: Emol