Chile tuvo un mal inicio en la ATP Cup, torneo que busca competir con la histórica Copa Davis. Perdió la serie ante Francia por 2-1. Los duelos de singles liquidaron a la escuadra capitaneada por Paul Capdeville.
El primero en salir al ruedo fue Nicolás Jarry (77°). El “Príncipe”, que desde esta temporada es entrenado por Dante Bottini, parecía que rompía la racha de nueve derrotas consecutivas con la que cerró 2019 ante Benoit Paire (24°). Jugó un brillante primer set, sacando de excelente forma y mostrando mucha calma en los momentos de tensión. Lo ganó 7-6.
Sin embargo, esa confianza se desvaneció y la segunda raqueta nacional se empantanó. El francés aprovechó cada error y exhibiendo un respetable revés ganó las dos siguientes mangas por 6-3.
Luego fue el turno de Cristian Garin (33°). No la tenía fácil. Se medía con el diez del mundo: Gael Monfils. El galo se lució, con tremendos derechazos desde el fondo y una increíble resistencia atlética. El primer parcial se lo quedó por 6-3.
En quizá el único error de Monfils, “Gago” aprovechó para quebrar en la segunda manga. Pero no lo pudo sostener. Su rival le quitó en saque en dos ocasiones y cerró el match por un 7-5.
Con la serie decidida, se jugó el dobles. El elenco nacional no se guardó nada y mandó a la cancha a Garin y Jarry.
Chocaban con una de las duplas más duras del mundo, compuesta por Nicolas Mahut (3° en el ranking de dobles) y Edouard Roger-Vasselin (16°), finalistas de Wimbledon.
Pese a no ser su especialidad, Garin y Jarry exhibieron un nivel altísimo y barrieron en dos parciales por 7-5 y 6-2. Así, decoraron un poco el marcador.
El siguiente desafío para Chile será Sudáfrica el domingo. Necesita ganar para mantener la ilusión de seguir en carrera.
Fuente: emol