La mañana de este sábado Natalia Compagnon llegó al Centro de Mediación Familiar de Providencia, región Metropolitana.
Para las 10:00 horas había pactada una audiencia en línea con la demanda de pago de pensión de alimentos que ella ingresó contra Sebastián Dávalos Bachelet, su exmarido, que hoy vive en Barcelona.
Separados desde 2017, la pareja tiene dos hijos y ante la falta de acuerdo entre las partes el caso requerirá la intervención de la justicia.
Aunque se esperaba la presencia de la exmandataria, al no haber avances desde el lado del hijo, según acusó la abogada de Compagnon; esta finalmente no llegó a la instancia.
Tras su salida del edificio, Compagnon no respondió preguntas de la prensa. Lo único que dijo fue que no emitiría declaraciones de momento.
En su demanda también acusó al padre de sus hijos de mantener un “consumo problemático de alcohol” y sufrir “reiteradas amenazas” en su contra.
A eso sumó “interrogatorios” a terceros de parte de él a modo de recabar datos de su vida familiar, junto a maltrato psicológico y económico.
Pero Dávalos ya salió a defenderse y el viernes BioBioChile accedió a una declaración suya en la cual afirmó que desde agosto de 2020, cuando firmaron el cese de convivencia, él “ha intentado en innumerables oportunidades llegar a un acuerdo en materia de alimentos”.
“Desde esa fecha y hasta ahora he tratado de llegar a un entendimiento civilizado civilizado con la señora Compagnon”, afirmó.
“Al día de hoy no he sido notificado de demanda alguna en mi contra y, pese a lo que la señora Compagnon señala, tampoco se ha iniciado acción alguna en mi contra en materia de alimentos ante los tribunales competentes. La ambición debe tener un límite. Por eso es que he decidido emitir este comunicado para manifestar, como lo he hecho durante largo tiempo, que siempre ha existido la voluntad y las vías de comunicación para llegar a un acuerdo que sea beneficioso para nuestros hijos”, remarcó.
Fuente: BioBioChile